El 10 de octubre de este año Katherine se dio cuenta de que había una fuga de agua justo frente a su casa. Ella vive en el barrio Los Castaños, comuna de Maipú, y no era primera vez que el sector presentaba un problema así.
Las casas de ese barrio son relativamente nuevas, «esto no debería estar pasando, yo llamé a la constructora y cuando vinieron me dijeron que eso lo tenía que solucionar directamente SMAPA«, explica Katherine.
«Hice el reclamo correspondiente el mismo día, me dieron un número de folio. Yo sabía que esto era tortuoso y con espera porque todos mis vecinos han tenido fuga«, relata Katherine. «Una vecina tuvo fuga en abril, vinieron recién en julio y le dejaron un hoyo que recién hace dos semanas vinieron a tapar».
La vecina de Katherine sufrió las consecuencias de una extensa filtración que no tuvo respuestas por meses y terminó con el colapso de su reja, que se cayó producto del hoyo generado.
«Desde octubre yo he llamado mucho, debo tener más de 20 llamadas a SMAPA. Llamo cada tres días, a veces una vez a la semana y no pasa nada», explica. Desde SMAPA, le aseguran a Katherine que le pondrán prioridad a su fuga de agua, pero ya van casi dos meses en que no le han dado ninguna solución concreta.
«Yo sé que las chicas del call center no tienen la culpa, pero es muy frustrante porque nadie te da una respuesta», comenta la maipucina que está frustrada con la situación, ya que algunos proyectos que tenía para su hogar se han visto obstaculizados por la filtración.
«Yo tengo un arbolito frente a la casa y ahí había pura tierra porque yo quería poner pasto, pero ahora eso está todo podrido porque se inundó. Se hizo como una piscina y salieron puras malezas», relata en medio de su desespero.
«También la fuga afecta a mi portón, es un portón corredero y el agua acumulada está cubriendo eso, ahora está todo oxidado y se está haciendo un hoyo porque se está fatigando el material y tengo miedo de que me vaya a pasar lo mismo que a mi vecina«, cuenta Katherine, quien añade que «cada vez me cuesta más abrir el portón».
«El otro día tuve que acercarme porque sentí un olor a descompuesto y venía de ahí, además está lleno de moscas, es muy desagradable. Yo tengo una hija de seis años y un hijo de dos, y me da lata, la situación es penca«.
Hay días en que la vecina afectada tiene que sacar su manguera para ayudar a rebalsar más aún el estancamiento de agua para que «salga ese mal olor y los pedazos de moho que se forman arriba».
Cuando el camión de SMAPA acudió a tapar el hoyo de la vecina de Katherine, ella le preguntó si podría arreglar la fuga que ella tenía, pero le respondieron que eso debía coordinarse por llamado telefónico, cosa que Katherine ha intentado hasta el cansancio.
«El agua se escucha toda la noche correr y esto también ha afectado a la presión del agua. Cuando me quiero duchar en las mañanas con agua caliente se nota que la presión es mucho menor».
La maipucina asegura que esta fuga y la de sus vecinos ha disminuido su calidad de vida. Ha acudido a las Redes Sociales para ver si logra una presión en la compañía municipal, pero hasta ahora, no ha recibido respuestas.