La semana pasada fue clave para la Convención Constitucional porque se cerró el plazo para presentar propuestas de normas que podrían ser incluidas en la nueva Carta Magna de nuestro país.
Había tres formas de presentar una norma: las iniciativas populares (78), las iniciativas constituyentes (940) y las iniciativas de Pueblos Indígenas (248).
Oficialmente, se presentaron 1.266 normas que la Convención tendrá que deliberar durante los próximos días, y dependiendo del tema a tratar, son ingresadas en su respectiva comisión.
Proceso de las iniciativas de normas en la Convención
Una vez que la iniciativa ingresa a cada comisión, la norma se debate, se cuestiona y se comenta. Terminada esa discusión, es sometida a votación general, lo que determinará si se acepta o se rechaza el contenido de la norma en términos generales.
En el caso de que se apruebe, quienes integran la comisión podrán realizarle indicaciones para perfeccionarla. En el caso de que de rechace, se deja de lado la norma y no podrá ser parte de la nueva Constitución. Sin embargo, hay puntos de la norma rechazada que pueden rescatarse y desarrollarse dentro de otra norma que haya sido aprobada.
Luego de lo anterior, se realiza un documento por comisión que contiene las normas aprobadas y las indicaciones que tiene cada una. Este documento somete a votación artículo por artículo, y aquellos que se aprueban pasan al Pleno para su discusión.
Ya en el Pleno, los y las 154 convencionales participan de una nueva votación. Si el artículo se aprueba, pasa a ser votado en particular, pero si se rechaza, vuelve a la comisión para que se le hagan modificaciones y pueda ser sometido nuevamente a votación. Cabe señalar que para que se apruebe debe cumplir con un 2/3 de aprobación, es decir, al menos 103 votos de convencionales avalando la iniciativa.
Todas las normas aprobadas en el paso anterior pasan a formar parte de la propuesta de la Nueva Constitución y son recibidas en la Comisión de Armonización, donde 40 convencionales revisan la concordancia y coherencia de las normas aprobadas en el Pleno.
Normas relevantes que fueron discutidas la semana pasada
Todas las normas que han sido aprobadas hasta ahora han sido de manera general, falta que se discutan en particular y luego su votación correspondiente en el Pleno.
Una de las normas que causó ruido en la ciudadanía y en los mismos constituyentes fue la aprobación de la nacionalización y nueva gestión social de la minería, del cobre, del litio y otros minerales y empresas. En otras palabras, traspasar las infraestructuras y bienes al Estado.
Desde la convención aclararon que esto implicaría una indemnización a quien corresponda de los bienes e infraestructuras nacionalizados. Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de la Minería, está en desacuerdo con la norma, asegurando que es «extrema y Chile no puede permitirse esto económicamente, ya que representa un riesgo para toda la economía nacional».
Otra norma que no estuvo exenta de controversias fue la aprobación en general del Congreso unicameral, que fue votada en la comisión de Sistema Político y se aprobó con un voto de diferencia. Quienes la respaldan aseguran que es una forma de garantizar velocidad y eficiencia en los procesos legislativos.
La iniciativa de norma que busca amnistía para los presos políticos también fue aprobada en general. Este proyecto se traduce en dejar en libertad a aquellos que tengan una condena o medida cautelar por su participación en actos de connotación política. Esto abarcaría hechos que fueron condenados desde el 11 de marzo del 1990 hasta el plebiscito de salida.
De todas formas, la propia presidenta de la Convención, María Elisa Quinteros, decía hace algunas semanas que “ninguna norma tiene los 2/3” para ser aprobada en sus procesos posteriores, por lo que es un desafío para los convencionales el buscar acuerdos que saquen adelante esta nueva Constitución.