Una delicada situación se vive al interior del Complejo Educacional Maipú en el marco del retorno a clases presenciales. Y es que este viernes se realizó una protesta por parte de apoderados y estudiantes a las afueras del colegio exigiendo que el establecimiento reconozca y tome medidas oportunas respecto de posibles agresiones sexuales que ocurren en su interior.
El día jueves, una apoderada se enteró de agresiones sexuales que sufrió su hija de diez años en el casino de la escuela. La niña declaró ante una fiscal que mientras hacía una fila para comprar almuerzo, cuatro estudiantes más grandes se acercaron a ella, la apretaron con sus cuerpos y la agredieron sexualmente. Asustada, la niña abandonó la fila y fue a buscar a una inspectora. “La inspectora se lo negó. Le dijo que no la habían agredido sexualmente, que solo la habían empujado”, relata la madre.
Debido a la denuncia que comenzó a circular, el colegio hizo circular un comunicado mediante redes sociales negando haber recibido denuncias por agresiones sexuales. Este hecho fue, en parte, lo que motivó hoy a realizar la protesta afuera del establecimiento.
Tras la manifestación se logró tener una reunión este viernes con las autoridades del establecimiento y le mostraron las grabaciones de las cámaras de seguridad del día lunes. En ellas pudo observar el nivel de aglomeración que se forma en el casino, sin embargo, desde la escuela se habrían negado a mostrarle las grabaciones del martes, día en que su hija fue agredida. A raíz de esta situación, y debido a las medidas insuficientes que el colegio ha tomado para abordar este abuso, la menor no asistirá al establecimiento y el lunes comenzará una terapia psicológica.
“Hablé con el sostenedor del colegio y la directora, pero ninguno de los dos fue capaz de darme el nombre de la inspectora del patio donde está el casino. Hay una segunda mujer a la que se dirigió mi hija, sobre la que tampoco conozco la identidad ni su cargo. Mi hija se acercó a ella, le contó sobre las agresiones y la medida que tomó fue dejar al niño sin almuerzo. O sea que lo tienen identificado, porque mi hija me contó que lo dejaron sin almuerzo, pero la directora me dice que no tienen idea de quién fue el niño”, agregó la apoderada de la afectada.
Más casos de agresiones sexuales
Lo que sucedió el martes no sería un caso aislado. Contando este caso, ya son dos las denuncias formales por agresiones sexuales que tomaron su curso en la fiscalía.
“Si bien son cosas que pueden pasar, lo que nos indigna es que se oculte la información, que se oculte esto que está pasando. Porque son cosas que están pasando en muchos colegios, pero los establecimientos deberían tomar cartas en el asunto y no ocultar la información. Hacer algo para que esto cambie”,
Otra apoderada, cuenta que su hija sufrió agresiones sexuales dentro del colegio hace tres años. Debido a que comenzó la pandemia y los estudiantes dejaron de ir, la apoderada no inició una denuncia y su hija comenzó a mostrar signos de estabilidad emocional. Sin embargo, junto con el retorno a clases, la niña decayó emocionalmente, pues comenzó a ver a su agresor a diario. “Esta última semana mi hija salió llorando del colegio todos los días”, relata la madre. Por este motivo, la niña ha debido empezar una terapia psicológica y la madre decidió ir hoy a poner una denuncia en Carabineros.
Entre quienes se encontraban en la protesta, había una ex alumna del Complejo Educacional que fue a hacer compañía a una amiga que es apoderada de una niña de tercero básico. La ex alumna comentó que fue a prestar apoyo debido a que ella también habría sufrido un agresiones sexuales el año 1999 en el colegio por parte de un profesor suplente. Según ella, en esos años la situación habría sido abordada de la misma manera en que se aborda hoy: “bajándole el perfil”, dice. Y agrega que quien estaba detrás de la negación de su agresión, era la entonces inspectora Ruth Rojas, quien hoy es la directora sindicada como la responsable de la negación de los casos de agresión sexual.
Otra apoderada, que mantiene contacto con una estudiante de la media, fue informada por ella de que «a raíz de la protesta que hicimos hoy día, una inspectora asumió ante los niños en el patio que había tres casos de agresiones sexuales en el colegio. Pero no han confirmado el resto. O sea que, si seguimos haciendo presión, quizás vamos a obtener toda la información”.
Una apoderada que tiene un cargo directivo en el curso de su hija, entró a una reunión que sostuvieron con la directora esta mañana, y contó que la directora manifestó que lo que estaban denunciando no era abuso, sino que era acoso e incluso juegos de niños. “La directora dijo que como son niños, esto no era abuso, sino que juegos de niños. Y lo otro que hizo fue negar cosas que nosotros sabemos que pasan, como que desde tercero básico a cuarto medio salen al mismo recreo. Está dejando como mentirosas a las niñas”, dijo.
Bullying y Violencia
Sumado a los casos de agresiones sexuales, el Complejo Educacional Maipú está enfrentando, de acuerdo con lo que informan los apoderados, severas situaciones de violencia y bullying.
Una cuenta de Instagram creada por estudiantes del Complejo Educacional Maipú, y que dejó de tener actividad esta semana, se dedicaba a difundir imágenes y videos que denigraban a compañeros y compañeras del colegio. Un video estuvo circulando estos días en que dos estudiantes de básica eran incentivados a golpearse entre ellos por alumnos mayores. En el registro se oye cómo los incitan a golpearse en los genitales, entre otras cosas.
“Hay mucho Bullying. Ayer una mamá informó que una niña de octavo le cortó la cara a su hija con un cuchillo cartonero. Y todo lo tratan de tapar, sobre todo la directora Ruth Rojas. Entonces ya es mucho”, dijo una madre.
Todos los apoderados que hablaron con La Voz coinciden en que la directora se ha encargado de negar y bajar el perfil a las acusaciones de agresiones sexuales y bullying que se viven al interior del Complejo Educacional Maipú. Por ello, algunas apoderadas buscan que la directora renuncie y no descartan realizar demandas colectivas contra el colegio debido a los casos de agresiones sexuales.
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