El 2014 entrevistábamos en La Voz a un emergente Camilo Antileo que con 23 años lanzaba su primer disco titulado «Hoy». En esos años comentaba que «yo no levanto ni porto las banderas de una izquierda conservadora, con glorias y derrotas pasadas”.
Y por esos años hablaba de la Nación Mapuche. Y aún en su horizonte no aparecía ir a México, ni convertirse en cineasta. Porque años después lanzaría «Warria» como renunciando a sus primeras letras y entrando de lleno en el Rock Mapuche. Porque Antileo transita por el arte y muta de forma constante.
Y en una de esas mutaciones aparece como cineasta. Incursionando en el mundo audiovisual con dos cortometrajes experimentales: «Warriache», opera prima que resulta ganadora del 24° Festival Chileno Internacional del Cortometraje de Santiago y luego con «Tuwun», trabajo premiado en el Encuentro de las Culturas indígenas Horizontes Comunes/Territorios Anhelados del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes en 2017.
Hoy en redes sociales publicó un interesante trabajo. Se trata de «ANTÜ LEWFÜ», un documental autobiográfico, donde el autor se hace cargo de cosas que por años le han preguntado: ¿Y el pueblo mapuche te escucha? ¿Por qué no hacer canciones en mapudungun?.