Es día sábado y en Coffee Culture, en medio de café y muchos libros nos reunimos con algunos miembros del Círculo Literario de Maipú. La agrupación fue creada el año 2005, con el fin de unir a poetas, escritores, cuentistas y narradores de la comuna.
La idea era aunar voluntades, solidarizar y promover la creación literaria. Fue así que organizaron lanzamientos de libros, y varios que llegaron como alumnos a los talleres de narrativa de la Municipalidad de Maipú, terminaron editando sus primeros libros.
El trabajo fue fructífero. Con apenas un año de existencia, editaron la “Antología Narrativa de Maipú”.
Corría el año 2008 y hasta organizaron un concurso de poesía, al que llamaron “Pablo Guíñez”, y en el que La Voz de Maipú fue patrocinador. En el Departamento de Cultura del Municipio estaba Luís Arenas, y el intercambio de ideas era habitual. Luego vendrían otros encargados de cultura y la relación se iría enfriando.
Pero nada de eso hoy importa. Estamos sentados, Liz la directora de La Voz y Nicolás, el ex Director, conversando con un puñado de escritores. Son todos mayores y sin ser nosotros jóvenes, nos sacan varios años de ventaja. La conversación es fluida. Son personas que leen, que producen textos y que rebosan cultura. Uno de ellos nos comenta lo preocupado que está por lo mal que habla la juventud. Y de ahí la conversación deambula por mil tópicos.
En la mesa está silente Elisa Ferrada, la “Mama Icha”. Escucha con atención y de pronto pide la palabra. Nos comenta que está con problemas de salud y que por eso está tan callada. La poetisa de la comuna, ha viajado por el mundo, cubierta por un mar de palabras conjugadas por ella. Ordenadas de manera tal, que producen bellas poesías.
También está Emilia Páez Salinas, quien nos regala “Mendiga en la noche”, su libro de poesías. La autora, oriunda de San Felipe comenzó en 1975 a publicar artículos. Hoy está dedicada a la poesía, y tras leer sus versos, uno queda con ese gusto dulce, que sólo te dejan las cosas simples, que de tan simples te asombran. Ella las descubre y las vierte en páginas escritas que estremecen.
Laura Frías, también está sentada con nosotros. Con ella acordamos el encuentro. Laura es de esas mujeres que tienen clase. Que les brota por los poros y que, hagan lo que hagan, no se pueden desprender de una distinción que parece haberlas acompañado desde que nacieron. Nos cuenta que está jubilada que escribe, lee mucho y, por lo que vemos, tiene un liderazgo dentro de la agrupación.
Yorka Gallegos es de Cerrillos, pero aprendió el arte de escribir en los talleres municipales de Maipú. Así fue como editó “Servido de Nostalgias”, su primer libro. Ella es conversadora, alegre y, por ello, tiene una carrera en varias radios, donde ha promovido la poesía y la escritura.
Estamos en esa mesa grande del Coffee Culture y la conversación fluye. Quizás ellos no se dan cuenta, o nosotros no somos lo suficientemente claros para hacerles ver el tremendo valor que tiene lo que hacen. El lema de la comuna es “Maipú Ciudad Feliz”, y nosotros creemos que una ciudad es más feliz, cuando hay gente que lee y que también es capaz de escribir. De producir textos que despertarán, en otros, diversas emociones.
Ese día acordamos comenzar a difundir sus poemas y textos en La Voz de Maipú. Además les iremos entrevistando, uno a uno, para escudriñar en sus vidas, y hacerlos más visibles al público.
Entonces convengamos en que este texto, es sólo un aviso. Prontamente los iremos conociendo a ellos y, más importante aún, los versos y textos que han ido pariendo.