El estadio Bueras cambió sus tradicionales pelotas de fútbol por collares para perros, peluqueros y alimento canino. En lo que fue un panorama ideal para sacar a pasear a los niños en el fin de semana, el coliseo deportivo se llenó de canes de todas las “razas sociales”.
En el Gimnasio Fernando González desfilaron los cachupines ABC1, quienes antes de salir a competir en la copa “Campeón de campeones Abrazo de Maipú” fueron puestos a punto por estilistas quienes provistos de peinetas, tijeras y hasta laca, le daban los últimos tijeretazos para que los canes lucieran del uno.
Salchichas, Akitas, Golden Retrievers, Poodles, entre más de cien razas desfilaban con la soltura de aquellos que nacieron para ser “dogs stars”. Sus dueños, aplaudían orgullosos y el público disfrutaba el espectáculo.
En la otra cara de la moneda, y separados por apenas unos metros, se encontraban los caniches a los cuales la vida les ha dado vuelta la espalda. Varias organizaciones que recogen perros abandonados, por quienes en algún momento juraron cuidarlos, organizaron jornadas de adopción. Así que no era extraño ver a más de un pequeño haciendo el berrinche del año, encariñado con algún cachupín carente de pedigree, inscripción ante el Kernel Club y despojado de raza, pero lleno de amor por entregar, que movía su cola de lado a lado, cómo diciendo “llévenme con ustedes. Prometo portarme bien”.
Dentro del Estadio Bueras, en la cancha, se vivió uno de los mejores espectáculos. Se instaló un circuito de “agility”, disciplina que consta de hacer pasar por obstáculos al can, quien guiado por su amo o entrenador, debe cumplir un trayecto que incluye saltos, túneles y equilibrio, en el menor tiempo posible y sin hacer faltas. Las gradas del Bueras se llenaron de maipucinos quienes disfrutaron de la pericia de algunos perros y también del despiste de otros, que se salían de la pista y quedaban desclasificados, ante el desconcierto de sus amos
Galería de Fotos
[nggallery id=71]