Ernesto Núñez Parra es maipucino de toda la vida. Estudió su enseñanza básica y media en Maipú, y luego se tituló de abogado por la Universidad de Chile.
Misma casa de estudios donde hasta hace poco trabajó como académico.
Al igual que muchos vecinos, ha sido testigo de la descomunal pelea entre la alcaldesa Cathy Barriga y el Ministro Mañalich, donde ambas autoridades se han disparado a quemarropa por televisión.
Cansado de este conflicto mediático, y aprovechando su profesión, decidió buscar una manera de frenar lo que a su juicio es un espectáculo político.
La querella apunta a los delitos de alerta sanitaria, ofensa a la moral de los muertos y ejercicio ilegal de la profesión de enfermera. Situaciones contempladas por los artículos 213, 268 bis, 318 y 321 del Código Penal (ver querella al final de la entrevista).
Hablamos con el abogado maipucino para entender la motivación de esta acción judicial y saber qué efectos prácticos tendrá sobre la primera autoridad comunal.
¿Cuál es tu motivación principal para querellarte en contra de la alcaldesa Cathy Barriga?
– Las personas más afectadas por esta situación de posición en los medios es la gente más vulnerable, la gente que no tiene medios, que tiene a sus adultos mayores en hogares, porque para ellos cada nota de prensa qué hay de este tema les genera más y más angustia.
¿Qué es lo grave a tu juicio en todo esto?
– Es parecido al caso de la persona que viajó infectado con coronavirus a Temuco y luego fue a una fiesta. En el actuar de la alcaldesa también hay una falta a las reglas y protocolos sanitarios dentro de un estado de calamidad pública, generando estrago a la población. Una conmoción que no repercute en la gente que está más informada. Su actuar afecta a quienes no cuentan con mucha información, en especial las personas de la tercera edad, a quienes les genera una gran incertidumbre.
¿Por qué una querella?
– La querella nace al no haber una herramienta que contenga a la alcaldesa y su actuar. Esto pues su objetivo claramente es sacar un provecho político escabroso de la situación, generando esta conmoción pública para poder estar en primera línea de la televisión y los medios.
La alcaldesa como funcionaria pública sujeta a probidad
La querella ya tuvo respuesta desde el Noveno Juzgado de Garantía de Santiago, declarándose «no a lugar», ya que no se pudo comprobar que Ñúñez sea alguien directamente afectado por el actuar de la alcaldesa.
Sin embargo, la parte interesante es que el tribunal remitió los antecedentes al Ministerio Público para ser investigados. Por lo que la alcaldesa podría ser citada a dar cuenta de sus dichos y comportamiento ante la justicia.
¿Cómo se entiende la resolución del tribunal?
-Técnicamente, el tribunal no descarta la existencia de los delitos, sino que solamente cuestiona la legitimidad de la persona que presenta la querella. Porque para ser víctima hay que reunir cierto tipo de cualidades, las cuales yo no reúno. Sin embargo, el Tribunal no le resta la gravedad de lo denunciado y deriva al Ministerio Público para que se genere la investigación en contra de Cathy Barriga.
¿Hay una lectura más allá de lo jurídico en esta acción?
– Acá hay una especie de gallito político, donde nadie ha aplicado restricciones o dado una señal sobre esta rivalidad. Me pareció que por la vía de la denuncia penal puede haber una especie de «córtenla». No es sano que una autoridad se saque fotos frente a un ataúd, no es sano que estés llamado a la alerta pública, diciendo que no hay control o que se oculta información. No es sano publicar a través de la página oficial de la municipalidad que la autoridad sanitaria no tiene en cuenta a los centros de adultos mayores.
En tu querella además haces mención a cuando la alcaldesa aparece vacunando gente.
– Va en la misma línea. Tampoco es sano aparecer haciendo como de enfermera y ejecutando los procedimientos como si lo fuera. Eso no es sano, no está bien. Y el reproche no es solo por sanidad o ética, sino que aquí derechamente hay una situación que se enmarca dentro de no uno, sino varios delitos.
¿Cuáles son a tu juicio los límites entre la figuración política y traspasar la ley?
– Una cosa es querer llamar la atención, denunciando con cifras lo que está ocurriendo a través de los canales idóneos. Pero otra cosa es hacer un show escabroso, que finalmente es lo que está haciendo la alcaldesa.
Nota del editor: La presente nota se enmarca dentro de un proceso judicial. Es importante señalar que todas las personas son inocentes hasta que la ley diga lo contrario y es posible que al final de este proceso las personas mencionadas en esta nota.