Ariel Tello Fallau es un maipucino que vive cerca del Metro Santiago Bueras, y con tal sólo 22 años ha logrado crecer como científico e investigar temas de desarrollo espacial. Este año fue seleccionado por la Agencia Espacial Europea (ESA en su sigla en inglés) para realizar una investigación sobre Física de Plasmas.
Entró a estudiar dos carreras en la Universidad de Chile, una de ellas es Ingeniería Civil Mecánica y la otra es Licenciatura en Física. También ha sido investigador del Núcleo Milenio de Materia Activa de la UCH, un centro de investigación de biólogos y físicos, que busca desarrollar una teoría física para la materia activa.
A principios del 2020, Ariel realizó su primera práctica profesional en el Laboratorio de Investigación Nuclear (LIN) de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), en donde participó en uno de los experimentos más grandes de detección de neutrones de Latinoamérica.
Además, fue profesor voluntario de física en el Preuniversitario José Carrasco Tapia (Preu JCT), que es totalmente gratuito para jóvenes que no cuentan con recursos para pagar uno privado y se quieran preparar para estudiar en la universidad.
Tal vez te interese leer: Revisa las sorprendentes imágenes que ha dejado el robot Persevarence en Marte a 100 días su aterrizaje
Despegue de Ariel con el área espacial
Acerca de cómo nació su interés por esta área, nos contó: “En el verano de mi primer año de universidad me puse a investigar en biofísica, ya que me gustaba mucho la física y la biología en el colegio, así que decidí trabajar con materia activa. Me gustó harto y aprendí muchísimo”.
“Conocí el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Universidad de Chile (SPEL), del cual actualmente soy miembro, junto con su director Marco Díaz, y le comenté que hice mi práctica en CCHEN, y justo él tenía un proyecto de investigación en propulsión por plasma y nanosatélites, y me dio la oportunidad de trabajar en eso. En este punto nació mi interés por la investigación en materia espacial”, agregó.
Sobre el trabajo investigativo que estuvo desarrollando el año pasado sobre de Física de Plasmas, Ariel nos manifestó que “básicamente es unir dos mundos, el de la física nuclear con el de la ingeniería aeroespacial. Utilizando plasma (que es el cuarto estado de la materia) para propulsar nanosatélites, se puede estabilizar la órbita de un satélite”.
Agencia Espacial Europea
En relación con el proceso de postulación al programa de la Agencia Espacial Europea (ESA) en donde fue seleccionado, nos expresó que “yo postulé entre enero y febrero de este año, envié mi CV, las investigaciones que he hecho y esperé una respuesta. Me contestaron y me dijeron que querían hacer una entrevista conmigo. Yo estaba muy nervioso. Y ahí me entrevistó mi actual tutora Charlotte Göetz y quedé seleccionado”.
“Fue una grata sorpresa, porque este programa está enfocado para estudiantes de magíster en Física, y para los proyectos de la ESA tenían prioridad los europeos, porque Chile no es un país miembro de la agencia. Y entre los más de 300 postulantes, quedamos como 10. Fue muy reconfortante”, comentó el joven.
Con respecto a su investigación con ESA, adelantó: “la próxima semana parto e investigaré acerca de la interacción del viento solar (que son un conjunto de partículas que emite el Sol) con un cometa”.
“En nuestro caso específico, vamos a estudiar un cometa que se llama 67P Churyumov-Gerasimenko, y vamos a estudiar la interacción del viento solar con la superficie del cometa. Esto genera unas ondas llamadas ondas espejo, que son muy interesantes de estudiar porque están relacionadas con los agujeros magnéticos. Esto es muy relevante de estudiar para la planificación de futuras misiones espaciales”.
Escuela de verano en China
Ariel nos contó también sobre la oportunidad que tuvo de viajar en 2019 a Beijing, en China, para participar en el International Summer Students Program de la Beihang University of Aeronautics and Astronautics, gracias a una beca que le entregó la Universidad de Chile.
“Tomé dos cursos: “Física Espacial” y “Diseño de Productos para la Innovación”. El primero fue muy entretenido, pero bastante difícil y en ese momento fue cuando sentí que volvió mi interés por el área espacial. Siento que al estar en un programa tan avanzado y específico me deja más preparado a enfrentar cualquier desafío. Me motivé bastante”.
Además, agregó sobre lo gratificante que fue ganar el premio como el mejor diseño mecánico que recibió en la competencia final del curso de “Diseño de Producto”.
Sueño con la Agencia Espacial Latinoamericana
Para Ariel “Chile tiene un gran potencial, aprovechando lo largo del país y por tener territorio cercano al polo sur (es más conveniente monitorear satélites). Si tuviéramos una estación satelital de alta tecnología en el sur, podría ser muy relevante para la carrera espacial.”
Por lo que reconoce que para él “fue decepcionante” la noticia de que Chile decidió mantenerse al margen de sumarse a la iniciativa que están levantando diferentes países de la región para fundar la Agencia Espacial Latinoamericana.
Y consultado sobre su sueño dentro de unos años más, Ariel expresó que “Me gustaría poder llegar a ser un gran científico para el país y aportar quizás en una futura agencia espacial latina”.
