En horas de la tarde del pasado sábado, David Toro Córdova (19) conducía un vehículo de su propiedad junto a dos de sus amigos cuando intentó ser fiscalizado por Carabineros.
Al intentar huir, el joven atropelló a uno de los funcionarios, y el otro que lo acompañaba utilizó su arma de servicio (subametralladora UZI) y disparó contra David, quien terminó fallecido en el lugar, mientras que los otros dos sujetos que iban a bordo del vehículo fueron detenidos.
En conversación con El Líder, medio de San Antonio, el padre del joven asesinado entregó su versión de los hechos, asegurando que su hijo no era un delincuente y que solo habría reaccionado mal, «asustado», por no tener los papales del auto al día.
«Mi hijo, a sus 19 años, no andaba cometiendo delitos.Tenía ese autito que era su esfuerzo y no tenía los papeles al día, así que a lo mejor eso lo asustó, pero no era para que Carabineros usara una UZI contra las personas, menos contra mi hijo, porque luego de darle un disparo en la cara, bajaron del auto y lo remataron, porque eso es lo que se comenta», señaló Álvaro Toro.
«Quería reparar el vehículo y aparte de eso tenía problemas en el motor de partida, así que niego todas las acusaciones que se están haciendo porque mi hijo no tenía antecedentes penales; tenía 19 años, estaba estudiando y trataba de hacer algo de plata manejando como Uber para no molestar en la casa porque no nos pedía nada. No consumía drogas, nada», agregó el afectado, indicando además que preparan acciones legales contra Carabineros.
«Queremos llegar al final de todo esto, que se aclare todo porque es a mi hijo al que mataron, es mi hijo, y a los amigos les dieron una golpiza brutal, porque son mayores golpeando niños y queremos que Carabineros no tape el sol con un dedo y que digan que el carabinero se pasó en su condición de oficial con lo que hizo», sentenció el progenitor.