Durante la madrugada de este domingo, un nuevo hecho delictual tuvo lugar Espacio Don Oscar, donde un grupo de delincuentes se dispuso a robar uno de los vehículos que se encontraba en el estacionamiento del recinto, cuya conductora, al poner resistencia, terminó baleada junto a otras dos personas, una de las cuales hoy se encuentra con riesgo vital.
Se trata de un hombre de 46 años, al igual que la mujer de 41 años que fue víctima del asalto, habían llegado al lugar a buscar a su hija.
Vecinos del sector aseguran que cada fin de semana se produce una serie de incidentes relacionados a las fiestas del polémico centro de eventos, como balaceras, asaltos, riñas, consumo de drogas, entre otros, y a pesar de los diversos intentos de parte de las autoridades para cerrar el recinto, no se ha logrado concretar.
En este contexto, Contigo la Mañana de Chilevisión habló con Pedro Acevedo, dueño de Espacio Don Oscar, quien luego de escuchar las quejas de una de las vecinas comenzó señalando que está «100% dispuesto a juntarse y poder convivir».
«Acá hay derechos válidos, como es el derecho a vivir tranquilo, en un ambiente sano y seguro, el que tenemos todos, no solo usted, pero también convergen derechos constitucionales, como es el derecho al trabajo y aquí estamos trabajando, entre locatarios y residentes, al rededor de 300 personas», sostuvo Acevedo, acusando instansigencia por parte de los vecinos.
«Si cerramos Don Oscar, la delincuencia no se va a acabar. Cuando no tenemos espacios seguros como los que nosotros tenemos, los muchachos van a carretear en clandestinos, en ‘parcelazos’, en donde no hay ninguna medida de seguridad y es muchísimo más peligroso», continuó el empresario.
Tras una nueva confrontación de la vecina que hablaba en un contacto telefónico, Acevedo insistió en que «el problema no es la discoteque ni la actividad comercial». «Acá el problema que veo de fondo es que la autoridad tiene cero disposición para preocuparse de lo que a ellos les compete y la obligación que tiene, que es la seguridad pública», agregó, sin asumir ningún tipo de responsabilidad en los hechos delictuales con los cuales se ha relacionado el recinto, incluyendo al menos 4 homicidios en los últimos 7 años.
La postura del empresario apunta a que la mayoría de los acontecimientos de alta connotación pública, así como también el resto de situaciones que no alcanzan a llegar a la televisión, como las balas que llegan a las casas de vecinos, se mantienen en el exterior, en el espacio público y, por tanto, legalmente no son de su incumbencia, algo que la vecina que se atrevió a denunciar y a contactarse con el medio contraargumentó.
«Claro, la bala viene de la calle, pero son de los vehículos que se estacionan afuera de las casas acá en Pajaritos, y esos chicos vienen de la disco. Vienen disparando desde que salen de la disco», comentó, recordando a modo de ejemplo lo que habría sucedido para las fiestas de año nuevo, donde «ni siquiera se podía entrar a las casas» por la cantidad de vehículos.
«Carabineros es bien poco lo que puede hacer, porque es demasiada la gente. Dice que es una persecución política porque [Vodanovic] es el único alcalde que ha hecho algo. Antes, las medias fiestas que hacía con el Vittori, la Cathy Barriga nunca hizo nada, y ahora que este alcalde intenta hacer algo dice que es una persecución política. Esto es antipolítico», aseguraron entre varios otros vecinos del sector que se incluyeron en la conversación.
En medio de la transmisión, luego de un corte comercial, Acevedo manifestó haber recibido información sobre la vecina que estaba en el contacto telefónico, a quien increpó señalando que «la conocía a ella y a sus hijos», que habían tenido contacto en otro momento con la hermana de Acevedo, y que incluso los hijos habían ido más de alguna vez a una fiesta en Don Oscar.
Esto fue derechamente desmentido por la vecina, quien respondió que solo había sido en una ocasión tiempo atrás y no en una fiesta nocturna, sino que para una celebración dieciochera, y mientras lo comentaba expuso que justo en esos momentos estaba recibiendo un mensaje de parte de la hermana de Pedro Acevedo con amenazas, lo que a su vez también fue desmentido por el dueño del centro de eventos luego de que el mensaje fuera borrado.
El despacho terminó con el empresario comprometiéndose supuestamente a seguir trabajando en mantener y mejorar la seguridad del recinto, junto con buscar un trabajo con Fiscalía para esclarecer los hechos.