“Los lugares donde se realiza actividad física deben estar preparados para prevenir y tratar posibles complicaciones de la práctica deportiva. Esto consiste en el debido equipamiento y la supervisión de profesionales del área, capaces de prevenir a partir de una adecuada evaluación y reacción ante una emergencia”, asegura Leandro Miret, presidente del Colegio.
Si bien la actividad física siempre es buena para nuestra salud, los riesgos asociados a la realización de esta en forma autónoma, sin supervisión y como queriendo lograr un objetivo a corto plazo, pueden llevar incluso a la muerte súbita, algo que el Colegio de Kinesiólogo quiere alertar, para que se tomen las medidas necesarias, principalmente en gimnasios, que hoy no cuentan con el personal adecuado para enfrentar una emergencia de este tipo.
“Las muertes inesperadas por problemas cardiacos (muerte súbita) son más de un 50% de todas las muertes de origen cardiovascular y muchas veces se encuentran relacionadas a factores de riesgo que pueden ser detectados por un profesional de la salud. Lamentablemente como sociedad siempre reaccionamos después de un hecho fatal, por eso como colegio siempre apostamos por la prevención. Los kinesiólogos son los profesionales capacitados para intervenir oportunamente ante los riesgos para la salud de quien realiza actividad física. La presencia de un kinesiólogo en un gimnasio, club deportivo o cualquier lugar donde se realice actividad física organizada puede reducir los riesgos de lesiones por la mala ejecución de una actividad física, pero por sobre todo pesquisar a personas con factores de riesgo cardiovascular y así prescribir actividades seguras”. Asegura Leandro Miret, presidente del Colegio de Kinesiólogos.
El profesional asegura que, un kinesiólogo está altamente capacitado para realizar una evaluación del sistema cardiovascular preventiva, “así como también, iniciar un proceso de reanimación cardiopulmonar inmediato, que en este tipo de emergencias puede salvar una vida. Frase hecha, pero con mucho sentido, prevenir y no lamentar”.