El próximo domingo 11 de diciembre la Democracia Cristiana enfrentará un nuevo proceso eleccionario. Al igual que hace dos años, distintas listas de militantes, intentarán hacerse con el control del partido a nivel local, provincial y regional, además de los delegados a la junta nacional.

En el proceso anterior fue Herman Silva, ex alcalde de Maipú y actual concejal, quien se quedó al mando de la DC comunal. Lo hizo apoyado por el poder municipal, y principalmente por la figura del alcalde Christian Vittori.

En esa ocasión, Silva le ganó a la lista que levantó Renzo Celedón, militante del PDC, quien fue apoyado por Freddy Campusano, quien –en ese entonces- detentaba el cargo de Consejero Regional.

Hoy la historia es diferente, aunque en ciertos puntos se une. Vittori perdió la elección y sus fuerzas se aúnan con el objetivo de volver a repetir un triunfo a nivel local. Alejandra Bustamante, administradora municipal en el gobierno comunal de Vittori, es quien encabeza una lista, donde aparece Raúl Villagran (SECPLA de la gestión Vittori) y Eva Ureta, quien habría sido colocada por Herman Silva.

Por el lado de Freddy Campusano, quien perdió como candidato de la Nueva Mayoría en Maipú, muchos fueron los nombres que circularon, a la hora de conformar una lista que compitiera por hacerse con el control de la DC comunal. Finalmente será el mismo Campusano quien liderará el esfuerzo de su sector por retomar el manejo de la DC local. Pero la historia parte mucho antes… y dejó a muchos heridos en el camino.

UN EQUIPO POLÍTICO FRACCIONADO

Tal vez la mejor señal, o lo que mejor ilustra que la candidatura a la presidencia local de la DC de Freddy Campusano, terminó fracturando a su equipo, es que al menos, un par de integrantes, hoy se refieren a él como Freddy Trampusano.  Hay enojo. Y varios se sienten víctimas de una operación política, que los dejó con sus aspiraciones truncadas.

Con las elecciones del PDC en el horizonte cercano, se realizó, según pudo investigar La Voz de Maipú, una reunión en la casa de un furibundo seguidor de Campusano, y otrora máximo fan de Christian Vittori. En dicho encuentro Campusano pidió al equipo analizar escenarios. En el fondo, se dio una conversación política, donde se esbozó que sería mala idea que Campusano optara por ir a una candidatura a Diputado y, que lo mejor, era intentar recuperar su puesto como Concejero Regional (al que renunció para ser candidato a alcalde).

En ese encuentro, tomó la palabra Marco Soto, activo militante del PDC Maipú, quien solicitó –sin padrinos mediante- su intención de ser candidato a la presidencia de la DC en Maipú. “He trabajado lealmente por ti Freddy, sin ser Campusanista”, fue una de las frases que lanzó.

La postura de Soto no logró sumar convencimientos y, en palabras de un asistente “tuvo poco eco”. De hecho, Campusano preguntó ¿Y tú Renzo?, como sondeando al derrotado candidato a la presidencia en las pasadas elecciones internas. Celedón contestó señalan testigos “fiel a su estilo, con balbuceos y acciones poco concluyentes”.

En ese encuentro no salió humo blanco y quedaron instalados como candidatos a encabezar la lista de Campusano: Marco Soto y Renzo Celedón. En el fondo no hubo quorum. Sin embargo, las listas son de tres nombres, es decir, uno que va como Presidente, otro como vicepresidente y un tercero como Secretario.

Lo que sí quedó claro, es que era necesario sumar al Concejal Abraham Donoso, a la lista, pidiéndole una alianza y que pusiera alguien de su equipo, con el fin de hacer la lista Campusanista más competitiva.

Asimismo, Freddy Campusano comentó que él integraría una lista a la Directiva Regional del Partido, lo cual fue aprobado por su equipo político.

Para la segunda reunión el camino, parecía comenzar a despejarse. Renzo Celedón y Marco Soto se reunieron antes. Quienes escucharon sobre el tenor de la conversación, indicaron a La Voz que, Celedón planteó que estaba dispuesto a bajarse y le pidió a Soto hacer lo mismo. La idea era buscar un nombre de consenso para el Campusanismo y no tensionar el ambiente. Ambos estuvieron de acuerdo en la pertinencia de hacer el gesto.

Esa segunda reunión se realizó en la casa del ex candidato a concejal por la DC: Francisco Pincheira. Asistentes a la misma, sostienen que “Renzo y Marco se bajaban, pero al ser una junta con más integrantes, aparecieron los que tenían apetitos voraces. Por ejemplo, Lucía Varas dijo que quería ser Presidenta de la DC comunal, y le puso de inmediato precio a su bajada: ser candidata a la junta del PDC”. Varios militantes querían integrar la mesa comunal y de Celedón a Soto, el listado creció y –esa vez- una vez más no se consiguió dirimir una lista con nombres.

La tercera reunión tuvo una quitada de piso de parte de los caciques de la DC. Campusano, Pincheira, entre otros, no asistieron al encuentro. Fue en esa reunión que se decidió que el nombre de la carta a la Presidencia de la DC local era Claudia Quinteros, operadora política del partido. Asimismo se dijo que la Vicepresidenta sería Patricia Flores y Eduardo Muñoz como secretario, colocado por el concejal Abraham Donoso. Sin embargo, sin la presencia de Campusano, todo quedaba en el aire.

UNA HISTORIA DIFUSA

De ahí en adelante, el panorama se torna difuso. Varios candidatos que quedaron en el camino, aseguran que quienes ordenaron la lista y dieron los lineamientos a la misma, fueron Abraham Donoso, Rodrigo Velásquez y el mismo Freddy Campusano.

Así llegó el día de la inscripción de las listas. Freddy Campusano apareció como candidato a la presidencia local de la DC; Patricia Flores como vicepresidenta y Eduardo Muñoz como secretario. El nombre de Claudia Quinteros fue bajado sin siquiera, avisarle a los más cercanos.

“Fue una operación política rasca, de poca monta. Bastaba con que Campusano dijera que quería ser candidato a la Presidencia local de la DC, para haber sumado apoyos. No era necesario este show de circo pobre”, dice uno de los que lo apoyó en las pasadas municipales.

Consultados miembros del equipo de Campusano respecto a las intenciones de Marco Soto y Renzo Celedón de encabezar una lista de la DC local, sostuvieron que “Marco Soto es un aporte, pero proviene de un sector de la DC que siempre está en contra de todo”. Sobre la bajada de Celedón expresaron que “la vez pasada ya perdió, por lo cual tiene el estigma del derrotado, además está en una situación emocional que no da garantías al equipo para los proyectos políticos futuros”.

Lo que nadie reconoce es que Campusano no siguió el camino original, es decir ir en una lista a la regional, pues ese tema lo estarían viendo altos dirigentes de la DC a nivel nacional.

Habría sido, en palabras de una fuente de Alameda 1460, la propia Goic quien vetó el nombre de Campusano, sin dar explicaciones. Nadie –en todo caso- se las pidió. Estaba todo dicho: Campusano no formaría parte de ninguna lista regional.

Por ello, se dice que Campusano no habría optado por ir en la comunal, sino que habría sido el único camino que le quedó disponible. Y ahí estaría la explicación, para un actuar político difuso, el que, al final del día, terminó con un equipo político no sólo derrotado, sino que también fracturado, por sus propios errores políticos

El 11 de diciembre será Campusano quien deberá enfrentar a Alejandra Bustamante, administradora municipal del Alcalde Vittori. Una derrota lo dejaría muy mal parado para cualquier proyecto futuro. Un triunfo en cambio, le permitiría –al menos- recuperar de forma parcial la moral de un equipo político que quedó bastante golpeado tras las últimas municipales. Todavía queda paño por cortar y, una vez más, serán los electores los que tendrán la última palabra.