Durante esta mañana se puso la primera piedra del sueño de más de 100 familias del campamento La Isla, quienes por más de 10 años han luchado por obtener su vivienda propia y digna donde poder formar un hogar. Hoy, por fin esos sueños están pasando a lo material.
Es que ha sido un largo trayecto para llegar hasta este punto. Tal vez lo más controversial y el golpe más fuerte para los vecinos fue el rechazo del Concejo Municipal de Maipú, en junio del 2016, a los fondos para la compra del terreno. Esto argumentado por la incomodidad que generaba el proyecto en los vecinos del sector.
Janet Ortega, tesorera de Flor del Valle, dice a La Voz de Maipú que «ha sido un camino difícil, el año pasado nos rechazaron el proyecto. Nos discriminaron totalmente, por vivir en campamento, pero no por eso bajamos los brazos, nos dio más fuerza».
A pesar de este hecho, donde las familias de Flor del Valle quedaron en punto cero, con la ayuda de Serviu y Techo pudieron adquirir el terreno y conseguir que la inmobilaria Tasco se hiciera cargo de la construcción de 104 viviendas sociales, de entre 57 a 67 metros cuadrados. Todo esto en un terreno de 16.565 metros cuadrados, que tuvo un costó más de $500 millones.
El directo del Serviu Metropolitano, Alberto Pizarro, nos explica que «la decisión de la ministra Paulina Saball, la coordinación que tuvimos con Techo, nuestra dirección de campamento y con el esfuerzo y organización de las familias, logramos conseguir el financiamiento adicional que nos posibilitó comprar el terreno y que el proyecto no perdiera su rumbo. Nosotros esperamos que la obra esté terminando hacia noviembre del próximo año»
Hoy, en un acto simbólico, porque la construcción ya está avanzada, es que se juntaron las autoridades y las familias que pasaran del campamento al conjunto habitacional Flor del Valle. En el acto estuvo presente el director del Serviu, Alberto Pizarro; el capellán de Techo, Juan Cristóbal Beytía; la alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga; y por supuesto, la directiva de Flor del Valle, representada por Pamela Ocares.
«Nosotros nos encontramos con discriminación en todos los niveles de la sociedad. Chile es víctima del prejuicio. Los prejuicio nos han ido separando y es eso lo que este proyecto puede romper. En este lugar se abre la posibilidad de que podamos construir ciudad entre todos, que no quede gente fuera», enfatiza el capellán de Techo, Juan Cristóbal Beytía, quien junto a voluntarios ayudaron a llegar hasta la construcción de Flor Del Valle.
El acto, estuvo marcado por discursos que resaltaron el esfuerzo que han realizado las familias para llegar hasta este punto, el cual se pudo ver representado en la emoción de los vecinos presentes. También, los más pequeños de las familias enterraron dibujos, que ellos mismo realizaron, los cuales representa lo qué esperan de esta nueva vida.
«Nosotros vamos a integrar este proyecto con lindos parques, áreas verdes y seguridad. Donde se conviva nuestra comuna, porque en Maipú no existen ciudadanos de primera o segunda categoría. Me siento muy orgullosa de la primera piedra y la alegría de tener un final feliz, que recién comienza», nos dice la alcaldesa Cathy Barriga.