El viernes recién pasado la Escuela de las Artes y las Tecnologías (EAT) celebró su cierre de cursos con la segunda versión del Festival Artemuda, actividad que duró todo el día, desde las 14 horas hasta las 22. Donde hubo la presentación de distintas ramas del arte, como música, teatro, danza y artes visuales.
«Este es un festival que nació desde la iniciativa del Centro de Estudiantes de la EAT. Postularon al Fondo Nacional de Cultura. Postularon, se lo ganaron y hoy en día se realizó este festival con el propósito de mostrar los avances de todos los FAD -formación artística diferenciada-. Es la muestra del cierre del año«, dice Andrea Rosales, asesora del Centro de Estudiantes, a La Voz de Maipú.
La Escuela de las Artes y las Tecnologías, es el único colegio de este tipo en Maipú, está ubicado a la entrada de la Ciudad Satélite. Es un establecimiento pequeño y con poca infraestructura, pero con mucho talento y pujanza de parte de los alumnos, que van desde séptimo a octavo básico.
La EAT tiene los ramos tradicionales de la malla que entrega el Ministerio de Educación, sin embargo, en paralelo se estudian diversas áreas del arte. A partir de la enseñanza media los alumnos pueden elegir entre cuatro especialidades: danza, teatro, música o artes visuales, los cuales son los famosos FAD. Es igual a un liceo técnico, pero del arte.
«Somos una escuela artística, la única de Maipú, pero no estamos reconocidos por el Ministerio de Educación. Es decir, que la asistencia, las notas y todo eso: no valen. Entonces, más o menos en octubre de todos los años hay que dar exámenes de validación, es como dar exámenes libres, pero acá te refuerzan y te apoyan. En realidad todo ha resultado súper bien, yo me siento orgulloso«, explica como funciona su colegio Marco Hidalgo, presidente del Centro de Estudiantes.
Al contrario de la media, séptimo y octavo básico sí están reconocidos por el Ministerio de Educación, por lo que sus evaluaciones y asistencias son como en cualquier colegio. A pesar de que los estudiantes no están obligados a asistir regularmente al establecimiento, porque es el examen de validación el que vale, el compromiso de niños es tremendo, tanto con sus ramos, como con sus profesores y con el proyecto educativo.
Otro de los puntos buenos que tiene la EAT es que es una educación más personalizada, ya que el colegio cuenta con solo 116 alumnos, y los cursos no sobrepasan los 20 niños. Esta elección es parte de su proyecto educativo, pero también afirman que por temas de infraestructura no podrían recibir más.
«Ojalá que algún día esto sea algo grande y que lo valoren desde la Municipalidad. Desde mi punto de vista, no se valora el arte en la comuna y eso me causa rechazo hacia algunos lados de la Municipalidad», afirma Marco Hidalgo.
El Festival Artemuda se desarrolló con total éxito, con el apoyo de los alumnos, de los profesores y de los apoderados, donde cada uno de estos estamentos aportó para ser una gran jornada de exposiciones donde cada FAD mostró lo mejor de lo suyo, además, de haber distintos stands de comida para juntar fondos.