El afecto y respeto, entendido como el reconocimiento y valoración del otro, hacia los niños y niñas favorece el desarrollo de las habilidades sociales como empatía, relación afectuosa con sus pares y adultos, y resolución no violenta de conflictos.
Una cultura basada en el buen trato requiere de un trabajo colaborativo, comunicación permanente y efectiva al interior del establecimiento de Educación Parvularia y, entre éste y las familias.
La Directora Regional Superintendencia RM, informa que con el fin de cautelar la existencia de ambientes de buen trato y el bienestar integral de niños y niñas, la normativa educacional señala que los establecimientos del nivel deben contar con instrumentos que regulen su convivencia, considerando las características propias de la primera infancia.
El establecimiento debe gestionar su convivencia a través de los siguientes instrumentos:
- Un Reglamento Interno que incorpore los deberes y derechos de la comunidad educativa y las normas sobre convivencia y buen trato.
- Protocolos de actuación que definan las acciones que debe realizar el establecimiento frente a la detección de situaciones de vulneración de derechos.
El Reglamento Interno y los mecanismos de actuación deben ser coherentes con los valores expresados en el Proyecto Educativo del establecimiento, y conocidos por toda la comunidad, para garantizar y promover el buen trato en el nivel.