Con 75 votos a favor, 68 en contra y dos abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó en general el proyecto que despenaliza el aborto consentido por la mujer dentro de las primeras 14 semanas de gestación.
Después del reñido debate que dio luz verde al proyecto, éste volverá a la Comisión de Mujer para su discusión en particular y revisar sus indicaciones.
Los ojos estuvieron puestos en los votos de la DC, que decidió no posicionarse como bancada frente al apruebo o rechazo de este proyecto. Finalmente, los votos fueron divididos: Miguel Ángel Calisto, Joanna Pérez y Jorge Sabag rechazaron la idea de legislar, mientras Manuel Antonio Matta y Daniel Verdessi no votaron.
La propuesta aprobada en la Cámara Baja no garantiza el acceso o legaliza el aborto, únicamente modifica el Código Penal para que no se persiga legalmente a aquellas mujeres que deciden abortar voluntariamente hasta las 14 semanas de embarazo. Castigo penal que, hoy en día, va desde los tres años y un día hasta los cinco años de prisión.
Reacciones de la Cámara tras la aprobación
La diputada del Partido Comunista, Karol Cariola, expresó después de la discusión que «estamos muy contentas de que haya primado la cordura. No tiene ningún sentido criminalizar a las mujeres que deciden abortar por razones adicionales a las tres causales. La criminalización solo obliga a tener que actuar en la ilegalidad, y eso es algo que no queremos que las mujeres sigan experimentando”.
Además, añadió que «valoramos que haya diputados y diputadas que hayan puesto en el centro su rol de representación pública y política, y no su visión personal e incluso religiosa. Creemos que es valioso que los parlamentarios de la DC, algunos de ellos, hayan votado a favor».
Natalia Castillo, del Frente Amplio y otra de las impulsoras de la iniciativa, dijo que «Este es un reconocimiento a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. No bastan las tres causales, es importante avanzar en despenalización y no criminalizar más a las mujeres por abortar. Vamos a seguir luchando hasta que el aborte sea legal, sea seguro y sea una garantía presentada por el Estado».
Con otros ánimos se expresaron los diputados de la cámara que se opusieron a la iniciativa. Francisco Eguiguren (RN) sostuvo que “hoy nuevamente hemos dado una triste demostración de que cuando hay que defender derechos fundamentales, sobre todo de los más inocentes, no tenemos los pantalones bien puestos».
El diputado Karin Luck, del mismo partido, afirmó que «es un día realmente triste» y que “no se trata de valores ni de religión, se trata del derecho fundamental declarado por Naciones Unidas que es el derecho a la vida, en esa declaración se dice que nadie puede quitarle la vida a otro arbitrariamente y hoy eso es lo que se está haciendo«. Finalmente concluyó afirmando que «Lo que se está cometiendo hoy día es asesinato».
En cuanto a la ciudadanía, se realizaron distintas convocatorias para apoyar la moción aprobada en la Cámara Baja: la más masiva fue en las afueras del metro Baquedano, donde se reunieron muchas mujeres alzando sus pañuelos verdes caminando hasta la moneda con consignas feministas y pro abortistas.
La actual ley de tres causales cubre apenas el 3% de los miles de abortos clandestinos que se realizan en el país, aseguran los movimientos sociales que consideran insuficiente la legislación actual.
