En una casa anónima, por ahí cerca de Rinconada con 3 Poniente, en medio de un barrio residencial, se gestó y se sigue construyendo lo que es la Compañía de Teatro Neyén, compuesta principalmente por maipucinos. Esta nació sin grandes pretensiones: nada más que llenar el vacío del cierre un taller de teatro comunitario en sus alumnos. Juntos se organizaron para no dejar de actuar. Algunos actores profesionales, otros aficionados con pasión.
¿Hasta dónde han llegado? Ni ellos se lo habrían imaginado.
No fue hace mucho tiempo, aunque pareciera que ya llevaran décadas de oficio juntos. En medio del año 2015, fue Rodrigo Camps quien orientó a estos alumnos, que estaban buscando un guía. Juntos conformaron un grupo de no más de 6 personas, que con el pasar del tiempo, se fue agregando y yendo gente. Además, de ser un clan bien dispar, ya que participa una pequeña de 12 años, la que actúa junto a ellos desde los 9.
El grupo estaba constituido, las ganas estaban, el empuje y el aguante también, pero … «somos un grupo, pero ¿qué hacemos?, ¿de qué hablamos?, ¿qué queremos mostrar al resto?», reflexiona Kathi Valenzuela, actriz de la Compañía Neyén sobre los inicios de esta aventura.
«Verde Susurro para Redolés»
Para la Compañía Neyén el contenido es fundamental en sus trabajos. Es que a ellos nunca los verán haciendo una obra hueca, la cual no tenga un mensaje, la que no te haga reflexionar, la que no haga pensar.
«Nosotros estamos siempre pensando en hacer teatro que haga pensar y que la gente lo pueda entender, eso es importante: que todo el público lo pueda entender. Nosotros hacemos teatro para que las personas vean realidades que pasaron en este país y que siguen pasando», nos asegura Rodrigo Camps.
Y así es la obra maestra de la Compañía de Teatro Neyén, «Verde Susurro para Redolés», la cual está basada en la vida y obra del artista chileno Mauricio Redolés.
La obra fue escrita y es dirigida por Rodrigo Camps y alcanzó importantes triunfos en el Décimo Festival de Teatro de Buin, en enero del 2017, donde obtuvo un reconocimiento por mejor montaje. «No dimensionamos que nos iba ir tan bien: el mismo hecho de trabajar con Redolés. Cuando fue a ver la obra y quedó impactado», son una de las impresiones que nos entrega Rodrigo Camps.
«Verde Susurro para Redolés» no es una obra lineal, no sigue la clásica lógica de una historia aristotélica. «La obra parte con Mauricio Redolés joven, a los 20 años, siendo torturado. Cuenta desde que a él le pasa esto, lo que le pasa en su exilio, pero no mirado desde el punto de vista de Redolés, sino que a través de las canciones y la poesía de él», explica el director.
La obra fue estrenada en el año 2016 y sigue más vigente que nunca. «Hace algunas semanas presentamos la obra en Villa Francia. Lo que se vivió ahí cuando terminamos de presentar, fue un aplauso que ninguno a recibido, se pararon a aplaudirnos. Eso fue porque, yo creo, que ellos se le vinieron muchos recuerdos que vivieron ellos en algún momento, de lo que representa su organización social. Incluso, estaban los papás de los hermanos Vergara. Fue súper fuerte«, nos dice Dani Gamboa.
El pago de la Municipalidad de Maipú
La mayoría de los que participan de la Compañía de Teatro Neyén son maipucinos y «nosotros hacemos validar la localidad como compañía, por lo mismo siempre decimos que somos una compañía de Maipú. Decimos que somos locales, que somos maipucinos como compañía y como entes naturales», lo dice con orgullo Gabriel Guerrero, miembro del elenco.
Sin embargo, y a pesar de haber presentado la obra gratuitamente en más de una oportunidad en la comuna, el apoyo que han recibido de las instituciones municipales han sido nulas y hasta humillantes con la Compañía Neyén.
«Nosotros tuvimos la oportunidad de actuar en el Centro de Creación Juvenil (CCJ), en el verano 2018, estuvimos al aire libre, con un logo de la Municipalidad de Maipú gigante detrás de nosotros, lo que nos rompía todo el esquema de la obra, porque es una obra súper social. Estaba el jefe de cultura, a nivel juvenil, la cara que tenía ese hombre después de nuestra presentación fue de horror… nos dijo si no teníamos otra obra, que hubiéramos presentado otro tipo de obra, por el contenido que tiene, es decir, que ni sabía de qué se trata la obra. La cosa era poner el logo de la Municipalidad de Maipú y que nos presentáramos, para demostrar, por así decirlo, que les interesa la cultura», recuerda ese día Rodrigo Camps.
«Ni siquiera nos ofrecieron agua, o aquí tienen un baño, aquí se pueden cambiar de ropa, ni confort», dice con evidente molestia Dani Gamboa. Al poco tiempo se presentaron en Cerro Navia, también de manera gratuita, pero el trato fue totalmente distinto. «Nos hicieron un catering, nos pusieron camarines, se preocuparon de las luces. Fue un cambio total», nos dicen los actores.
La reflexión que hace la Compañía de Neyén es clara: no hay una preocupación real en la cultura de la comuna, y no solo es algo ahora, sino no que un mal síntoma o ignorancia que se arrastra hace años, independiente del color político.
«Yo llevo muchos años aquí en Maipú, viviendo y haciendo teatro en Maipú. Hice teatro en colegios, estuve festivales de teatro maravillosos en esta comuna: se llenaba el auditorio, 3 días llenos de teatro espectaculares. Pero llegó un momento que el teatro dejó de ser importante para ellos y murió no más», dice con tristeza Rodrigo Camps.
No todo es teatro
Los que componen la Compañía de Teatro Neyén, no solo son actores, sino que sus pasiones se dividen en diversas actividades.
Por ejemplo, juntos crearon el Centro Cultural Neyén. «La idea de crear el centro cultural es dar un aporte a la comunidad, como la reciprocidad, sobre todo a Maipú. Entregar talleres, por ejemplo. Ahora, estamos planificando cómo llegar a hacer eso», nos dice Kati Valenzuela.
Además, poseen la Radio Neyén, la que se compone de postcast que se suben a una plataforma virtual, donde la gente lo puede escuchar cuando quiera. Los chicos ya llevan cerca de 30 capítulos.
Hasta el momento son dos programas que se están emitiendo: «Entrevista en la casa» conducido por Rodrigo Camps, quien entrevista a gente dentro de las distintas ramas artísticas. Y «De lo humano y lo Profano», que lo conduce Gabriel Guerrero, actor de la compañía, quien dedica este programa a bandas emergentes de Metal.
Próximamente, saldrá al aire el nuevo programa «Kda Loca con su tema», que conduce Kathi Valenzuela, el cual va dirigido a la mujer, con el fin de aportar a empoderar y visivilizar cosas que las personas no quieren ver.
El prometedor futuro
La Compañía Neyén está retomando el vuelo de una obra que estaban casi por desechar, esto porque pensaban que «Verde Susurro para Redolés» ya había cumplido su ciclo. Por ello habían comenzado a hacer un nuevo proyecto, pero sin pensarlo se les solicitaron muchas funciones.
Actualmente, presentarán «Verde Susurro para Redolés» todos los viernes de octubre, a las 20 horas, en el Casa Quemada, ubicado en calle Catedral 2841.
«Espero que no nos separaremos, seguir trabajando juntos lo máximo que se pueda en el tiempo. Nos gustaría ir a presentar la obra fuera de Santiago, en el extranjero. Lo que es viable si seguimos en el mismo nivel en el que estamos en este momento», reflexiona sobre el futuro Rodrigo Camps.
Además, la Compañía Neyén está postulando al Festival Internacional de Teatro & Danza (FINTDAZ), el cual se desarrolla en Iquique. «Sería un orgullo para nosotros Para allá estamos disparando nuestro dardos», dice Rodrigo Camps.