La crisis hídrica ya es una realidad a nivel mundial y sus consecuencias se están empezando a notar también en Chile. El presidente Gabriel Boric ya se refirió a un posible racionamiento de agua en la Región Metropolitana, medida que ya se lleva a cabo en otras localidades de la zona central.
Si bien la crisis hídrica ya está llegando a un punto crítico, las proyecciones para este invierno son que será bastante seco, situación que agravaría aún más el escenario de escasez de agua.
«No voy a dar una fecha ahora, depende también de las condiciones climáticas que tengamos, pero es algo que el Presidente Piñera de hecho me advirtió, que es algo que más allá de su voluntad iba a ser un tema sobre la mesa, me decía que había abastecimiento asegurado hasta mediados del segundo semestre, pero después depende mucho de cómo se venga el invierno», señaló hace algunos días el mandatario.
Así lo confirmó también el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, quien aseguró que «si tenemos poca agua este invierno, efectivamente más adelante podríamos tener riesgo de racionamiento».
Por lo mismo, las autoridades ya están pensando en un plan de racionamiento de agua en la capital que afectaría principalmente al sector oriente de Santiago, específicamente a las comunas de Lo Barnechea, Las Condes y Vitacura.
Ulrike Broschek, subgerenta de sustentabilidad de la Fundación Chile, explicó en conversación con Meganoticias que «la zona oriente de Santiago se alimenta de una subcuenca que es del río Mapocho, y es esta subcuenca y este río que está experimentando una baja de caudales. Estamos hablando de una quinta parte de un año normal».
De llevarse a cabo esta medida, el agua estaría disponible solo por ciertas horas, lo que dificultaría que locales comerciales y supermercados puedan funcionar.
Las municipalidades de Las Condes y Lo Barnechea ya han puesto en marcha medidas para subsanar la crisis hídrica que se vive en el país. Por ejemplo, en Las Condes se ha prohibido regar entre las 10 y 6 de la tarde. También se han preocupado de disminuir las áreas verdes que consumen mucha agua, reemplazándolas por otras que tengan bajo consumo.
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