Era 11 de abril de 2017 y el «decano de la prensa» El Mercurio sacaba una nota sobre la nueva camada de abogados «sub 40» que estaban asumiendo los casos más mediáticos del país. Entre varios profesionales, destacaba el nombre de Cristóbal Bonacic Midane.
Su nombre no impactó a los conocedores del derecho en Chile. Abogado de la Universidad Católica, egresó el 2003 y fue reconocido como el mejor de su generación. El 2000 ya había recibido el premio Jaime Guzmán Errázuriz como «Mejor Alumno de Derecho Constitucional».
Además el 2003 fue elegido como el Mejor Alumno de Derecho Comercial. Una vida repleta de pergaminos. Postitulado en Criminología (2007) y Diplomado en Reforma Procesal Penal (2006), Bonacic se desempeña como profesor de Derecho Penal y Derecho Procesal Penal en su alma mater.
Con experiencia como Abogado Asesor de la Unidad Especializada en Delitos Sexuales y Violentos de la Fiscalía Nacional del Ministerio Público, al poco tiempo decidió irse al mundo privado.
Hoy integra Rivera, Bunger, Barahona y Bonacic Abogados, bufete especializado en litigios penales de alta complejidad.
Caso Penta, SQM y atropello de Martín Larraín
Cristóbal Bonacic es uno de los abogados de Cathy Barriga; sin embargo, esta no es la primera vez que trabaja con políticos. Representó al exAlcalde de Santiago Pablo Zalaquett (hoy lobbista) y Carmen Luz «Coca» de Castro en el Caso Penta. También a los hijos del senador Jorge Pizarro -Jorge, Sebastián y Benjamín- en el caso SQM.
En 2014 durante el juicio por el atropello y muerte de Hernán del Carmen Canales Canales, Bonacic ejerció como defensor de Sofía Gaete, amiga de Martín Larraín, la cual fue condenada por obstrucción a la justicia.
Uno de sus casos más recientes corresponde a la defensa realizada a Pablo Mackenna, cuando el presentador de televisión en agosto de 2023 se encontraba en prisión preventiva luego de protagonizar un accidente de tránsito en estado de ebriedad, oportunidad en que el alcotest arrojó 1,27 gramos por litro de sangre.
En dicha oportunidad el abogado consiguió que se revocara la medida cautelar dejándolo con arresto domiciliario, arraigo nacional y la suspensión de licencia de conducir.
Hoy buscará desacreditar la tesis de la fiscalía, aunque su misión más próxima será en menos de 24 horas. Deberá evitar que Cathy Barriga sea detenida en una cárcel durante los 120 días que -preliminarmente- dure la investigación.