El pasado 1 de junio se celebró el Día Mundial de la leche, una fecha propuesta en 2002 por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. La leche es un alimento que proporciona una variedad de nutrientes esenciales para el ser humano y es reconocida como una excelente fuente de vitaminas y minares, especialmente calcio.
Aunque la leche de vaca es ampliamente consumida en el mundo y tiene una gran importancia nutricional en diversas etapas de la vida, su consumo ha sido cuestionado en la actualidad. Ante ello, la académica de la Escuela de Nutrición y Dietética UNAB, Camila Cisternas, nos aclara algunos mitos relacionados con su ingesta.
La leche es la mayor fuente de calcio
Si bien la leche y sus derivados, como el yogur y el queso, son las principales fuentes de calcio disponibles para la mayoría de la población mundial, también existen otros alimentos que son excelentes fuentes de este mineral. Entre ellos se encuentran el brócoli, las sardinas, las bebidas de soja y las almendras.
Debemos consumir leche todos los días
Se recomienda el consumo de leche a lo largo de toda la vida. Incluso, las nuevas Guías Alimentarias para Chile proponen en uno de sus mensajes «Consume lácteos en todas las etapas de la vida». La ingesta de 2-3 productos lácteos al día puede cubrir la mayor parte de las necesidades de calcio, complementándola con otras fuentes.
Un alto consumo de leche en adultos puede traer problemas de salud
Aunque se ha cuestionado la leche en relación con posibles problemas de salud, hasta ahora solo se ha asociado su consumo a la prevención de enfermedades importantes, como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y la salud dental, entre otras.
Las bebidas vegetales son más saludables que la leche de vaca
Las bebidas vegetales a menudo se promocionan como productos más saludables, pero esto no es necesariamente cierto. Todo depende de su composición. Es importante leer las etiquetas y evaluar su uso de manera personal, ya que muchas bebidas vegetales no contienen proteínas de alto valor biológico.
La leche descremada es más saludable que la entera
La leche descremada contiene menos grasa que la leche entera y, por lo tanto, aporta menos calorías por mililitro. La grasa láctea contiene ácidos grasos que se les atribuyen ciertos beneficios potenciales para la salud. Además, no hay evidencia de que el consumo de leche entera aumente el peso corporal en comparación con la leche descremada.