Un reportaje emitido por CHV reveló la denuncia de un desesperado dueño de un edificio en la comuna de Santiago. Hace tres años, desconocidos se tomaron los seis pisos del inmueble, que hoy se ha convertido en un nido de delitos relacionados a las drogas, estafa y prostitución.
Juan Valenzuela tiene una inmobiliaria familiar, y compró el edificio en 2019 para arrendar los más de 30 departamentos que se reparten en los seis pisos que tiene la torre. Sin embargo, su plan no funcionó, y hasta ahora solo ha significado un gran gasto de dinero.
Serían 34 los departamentos que hay en este edificio en total y que están siendo habitados de manera ilegal. Al parecer, extranjeros de distintas nacionalidades habrían aprovechado el Estallido Social para tomarse esta torre con violencia.
Se trata de la «Shakira Tower I», ubicada en el corazón del barrio Meiggs, comuna de Santiago.
Los vecinos del sector han acusado que el inmueble hoy es un nido de violencia, donde priman las drogas, armas y la prostitución. De hecho, un equipo del CHV entró como incógnito a este edificio y notó que casi todas las puertas de los departamentos tenían soldadas rejas protectoras.
Un testimonio de una persona que vive por el barrio, dio cuenta de que probablemente las rejas serían por peleas internas entre quienes habitan este lugar de manera ilegal. «Se peleaban entre ellos, no sé si por drogas o por cosas robadas, se apuñalaron hartas veces… los pacos no pudieron entrar nunca, la policía no puede entrar ahí, tienen armas», dijo para el canal.
El dueño afectado por esta toma, asegura que la mayoría de las personas que viven ahí, lo hacen de manera gratuita, aunque habría un líder que a veces cobra arriendos y lucra sin ser el dueño verdadero del inmueble.
Según Juan Valenzuela, «está tomado por una mafia que lucra con los subarriendos». Mientras él sigue pagando el crédito hipotecario y contribuciones, hay un grupo que vive ahí completamente gratis. Juan cuenta que los tipos se desconectaron del medidor de luz y agua, y se conectaron directamente a la matriz y a los cables, por lo que no pagan cuentas tampoco.
Además, el hombre detalló que en varias ocasiones han evidenciado que al estacionamiento del edificio llegan autos sin patentes que posteriormente desarman, y que, presuntamente, serían robados.
El equipo de CHV consultó con un abogado sobre las opciones que tiene el dueño para recuperar su edificio. El profesional Cristian Escobar explicó que se puede acudir a una corte o a una fiscalía, y que esta última opción, la penal, sería más rápida y recomendada.
Asimismo, aseguró que quienes se tomaron la torre podrían arriesgar una pena de hasta 3 años en la cárcel por el delito de usurpación violenta. Sin embargo, Juan Valenzuela junto a su abogado ya ingresaron una denuncia del tipo civil, la que ha tardado mucho en prosperar.
De hecho, aún no se le asigna un juez a su caso, lo que lo mantiene desesperado por la pérdida económica que todo esto ha significado para él.
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