Carolina Pérez, como muchas personas, quedó sin trabajo después del estallido social el pasado 18 de octubre. Estuvo algunos meses pensando en qué hacer hasta que llegó la pandemia y la situación se veía aún más difícil. «No tenía cómo generar dinero sin salir de mi casa», cuenta.
Y fue entonces que se animó a aplicar lo que había aprendido en algún momento realizando cursos de Reiki, donde incluso se tituló como master, y se lanzó con MyoReiki, una pyme de terapias complementarias.
«Mis servicios marcan la diferencia por que puedo complementar distintas metodologías, como masajes, meditaciones guiadas, Reiki a distancia. Puedes estar en otra cuidad y no hay ningún problema. Tengo varias ramas del Reiki, las que se pueden potenciar según la necesidad de cada paciente», explica la vecina.
A pesar de contar con algunas dificultades como el no poder recibir a pacientes en su domicilio -porque la pandemia no ha terminado- o el hecho de que no mucha gente crea en este tipo de medicina alternativa de origen japonés, la mujer no piensa dar paso atrás.
«Espero seguir atendiendo y ayudando a muchas mas personas y además realizar clases a quienes quieran aprender este hermoso camino del Reiki», sentencia la maipucina.
Conoce más sobre este emprendimiento en el Instagram de MyoReiki haciendo clic aquí.
Su contacto es: +56985457372.