La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó hoy el proyecto presentado por la diputada Claudia Mix para declarar el 30 de noviembre como el Día Nacional de las Víctimas del Asbesto. De ese modo, a la iniciativa sólo le queda ser aprobada por la sala del Senado para convertirse en ley.
El 30 de noviembre de 2001, Eduardo Miño, miembro de la Asociación Chilena de Víctimas del Asbesto, se inmoló frente al Palacio de la Moneda, como un acto de protesta para denunciar la problemática socioambiental provocada por el asbesto.
El proyecto aprobado hoy busca que los 30 de noviembre de cada año, el Estado tenga que promover y difundir la realización de actividades en el marco de la conmemoración de este día, con el objeto de concientizar sobre los efectos del asbesto en los procesos industriales y de construcción.
La iniciativa, además, autoriza a la construcción de un monumento, en las comunas de Maipú y Coronel, en conmemoración a las víctimas del asbesto, y una placa conmemorativa en La Moneda, específicamente en el sitio en donde Eduardo Miño se inmoló.
“El asbesto continúa siendo un grave problema para miles de personas en nuestro país. Han pasado casi dos décadas desde su prohibición oficial, y sin embargo el asbesto sigue presente en nuestras vidas y se perfila como una amenaza en potencia a lo largo de nuestro territorio”, afirmó la diputada Claudia Mix.
El asbesto es un mineral mortífero que ha causado la muerte de millones de personas a lo largo del mundo y que se ha utilizado en un sinnúmero de procesos industriales y como materia prima en la construcción de placas onduladas tipo “pizarreño”, de viviendas, tuberías de agua potable y alcantarillado, sistemas de freno, aislación, entre muchos otros productos que siguen presentes en la vida diaria.
“Este mineral, cuando se deteriora o se remueve libera sus fibras, las que son altamente peligrosas y contaminantes, y que son además las principales causantes de enfermedades como las asbestosis, el cáncer broncopulmonar y el cáncer de la pleura, las que matan a más de 100.000 personas cada año, alrededor de todo el mundo”, explicó la diputada Claudia Mix.
“Hemos impulsado esta iniciativa en conjunto con diversas organizaciones territoriales y sociales para concientizar de esta emergencia ambiental. Esperemos que podamos de una vez por todas erradicar definitivamente este dañino material de nuestras vidas, y que nunca más tengamos que llegar a extremos como el de Eduardo Miño, que para siempre quedará en la memoria de la lucha contra la contaminación y la buena calidad de vida”, agregó la parlamentaria.
El proyecto impulsado por Claudia Mix cuenta además con las firmas de las diputadas Carmen Hertz, Francesca Muñoz, Camila Rojas, y de los diputados Félix González, Gastón Saavedra y Enrique Van Rysselberghe.