Heber Vega es maipucino por opción, aunque al alero de una iglesia comenzó a caminar por el mundo. Y fueron esos caminos los que lo llevaron a Irak, país en el que decidió quedarse con su esposa y criar a sus cuatro hijos. ¿Qué es lo que le gusta de allá? ¿Qué cosas extraña de acá?
Es lo que te contamos en la siguiente entrevista…
La vida de Heber y su familia transcurre a 14.172 kilómetros de nuestra comuna. Vive en la región del Kurdistán en Irak junto a su esposa y sus 4 hijos. Para muchos puede ser un suicida. Él se declara un tipo contento
Si se hiciera una encuesta en Maipú y la pregunta fuera ¿en qué parte le gustaría vivir? probablemente nadie diría en la región del Kurdistán Iraquí. Y es que a menudo las noticias que vemos en los medios sobre ese país, tienen mucho que ver con balas, drones y terrorismo.
Pero Heber Vega no piensa igual al resto. Su padre y sus tíos se criaron en Maipú y Heber siendo niño, solía pasar las fiestas en nuestra comuna. A los 18 años se vino a vivir acá y hasta que cumplió 20 años, su vida era de esas que se denominan “normales”. Pero algo cambió. Heber comenzó a viajar y junto a su esposa decidió con 25 años radicarse en Kurdistán, al norte de Irak.
El día que se realizó esta entrevista en Maipú el termómetro marcaba 9.4 grados y la humedad alcanzaba un 93%. Para Heber las cosas eran distintas: con 44 grados de calor y apenas un 7% de humedad, su panorama era diametralmente opuesto.
– ¿Desde cuando estás en Irak?
– Desde Septiembre del 2003. Llegamos a Irak en tiempos de la invasión americana. Después de años de estar relacionado a una iglesia en Maipú. La cual estaba en ese entonces, entrando en toda la onda de brindar ayuda social a lugares complicados. Irak era uno de ellos. La verdad es que esa iglesia está liderada por americanos y fueron ellos los que tenían contactos en USA por aquellos años para poder entrar a ese lugar.
– ¿Fue muy duro viajar para allá?
– Una vez que el link estaba hecho, fuimos entrenados por una ONG internacional para cumplir funciones humanitarias en el lugar. El país en aquellos días venia saliendo de un régimen del terror de casi 40 años. Y en la zona en especifico donde comenzamos nuestras labores humanitarias habían sufrido genocidio de parte de Saddam Hussein. Esa zona es el Kurdistán. Donde su gente son Kurdos, una nación milenaria compuesta de millones de personas de la misma etnia, y cultura, pero que por razones políticas son la nación mas grande del mundo sin un territorio propio. Son cerca de 40 millones los Kurdos en el mundo, y viven en su mayoría en zonas de Irak, Turquía, Siria, e Irán.
– ¿En qué momento te comenzó a gustar Kurdistán?
-Fue a amor casi a primera vista con la gente, y su cultura, y decidimos quedarnos por algunos años, y esa historia se ha prolongado por casi 12 años ya
– ¿Por qué decides radicarte allá?
– En un principio por un tema vocacional y también valórico. Estaba en toda esa parada de “cambiar el mundo” y creer que decisiones como estas podrían ayudar a ese fin. También con mi esposa éramos jóvenes y sin hijos, entonces era de cierta forma aventurero el llevar una vida así. Si a todo eso le agregamos una fuerte influencia espiritual de nuestra iglesia en aquellos años, todo nos indicaba (excepto nuestras familias) que era una buena decisión. Yo creo que el ser idealista ayuda en mucho para vivir una vida de esta forma también.
– ¿En qué te ganas la vida en Iraq?
Desde 2010 como fotógrafo profesional. Antes, a través de apoyo financiero de tercera personas que ayudaban con los proyectos sociales en que nos desenvolvemos.
– ¿Qué opinas de la cobertura de prensa que hacen de Iraq, es así la realidad?
– Como en todas partes hay mucho de cierto en algunos análisis, pero a la vez mucho de manipulación de los medios para llevar a cabo sus propios idearios políticos.
-El otro día publicabas la foto de un DRONE americano que cayó en Iraq ¿en qué momentos sientes miedo de vivir ahí?
– La verdad, es que en la zona en que vivimos no se ve lo que todos han visto de las noticias en Irak. Es una zona segura, protegida y con mucho auge económico. Mucha inversión y explotación de recursos naturales, con un boom inmobiliario, y todo lo relacionado a empresas mineras o en este caso petroleras. Así que muy distinto a lo que generalmente escuchamos de Irak. Con todo eso, aun estamos en un país MUY inestable y hemos sido testigos del flagelo del terrorismo en primera persona. Así que hay que manejarse con cuidado al fin y al cabo en muchas situaciones, en especial cuando te alejas de la ciudad.
– ¿Qué cosas destacas de la cultura de allá?
– La generosidad, sobre todo con el extranjero que esta dispuesto a escucharles y respetar su cultura y religión. Son mas hospitalarios que los chilenos en ese ámbito, y se parece al Chile que aun se encuentra en provincias.
– ¿Qué cosas has visto que te han marcado?
– Son demasiadas. No me imagino una vida, sin las experiencias que he visto y experimentado acá. Lo ultimo quieras ha sido la vida de miles de familias que por estos años andan arrancando de la guerra y de ISIS en en esta zona. Tenemos una de las catástrofes mas agudas en la historia con respecto a refugiados, después del conflicto en Siria. Y el interno en Irak con el mismo ISIS. Ver esas familias, compartir, escuchar y servirles es toda una escuela. La mayoría de la gente piensa que la gente refugiada o desplazada son gente pobres, destinadas a ello, pero NO, eso no es cierto. Es gente normal, que construyó su casa, sus negocios, y que de un día para otro deben huir de la guerra sin mirar nada atrás de lo que construyeron por tantos años, es muy doloroso. Y llegar a un lugar distinto, con otro idioma, vivir en carpas y padecer de muchas cosas. Es muy difícil!! Si fueran personas pobres que toda su vida debieron enfrentar estas cosas seria muy distinto, pero estamos hablando de gente como tu y yo. Profesionales y todo incluido.
– ¿Que extrañas de Maipú?
– El clima, los pocos amigos, una buena cerveza en el Rustico, y comida chatarra como la Tía Lucy! jajajaj
– ¿Cómo evalúas la incursión americana allá?
– ¡Un tremendo error! como siempre en la historia americana. Que para servir sus propios intereses económicos, y políticos se encargan de destruir otros países a costa de su poderío bélico. Y después justificar todo con sus patriotismo barato. Realmente es algo que me he desagradado mucho, y se siente en mis palabras.
– Sabemos que tienes una iniciativa fotográfica para niños allá ¿en qué consiste?
– El ONE-SHOT es un proyecto que busca experimentar (por ahora) llevando fotografía y cámaras a niños con escasos recursos, o post trauma. Como en el caso de los refugiados. La idea es poder sacarles y poco del contexto, y abrir sus ojos a otras cosas dentro de su realidad. Colores, formas, luz, etc. Hemos llevado a cabo varios talleres y todos muy exitosos. Los resultados han sido increíble en cuanto a la misma fotografía de los niños. Sus exhibiciones han dejado boca abierta a sus mismas familias.
Fotos de Irak (Gentileza Heber Vega)
