Impresión ha causado en redes sociales la imagen captada por Roberto García-Roa, biólogo y fotógrafo que se convirtió en el ganador de la nueva versión del concurso de fotografía de la revista BMC Ecology and Evolution, con un registro en que capta a un hongo zombi creciendo desde una mosca.
Y es que, aunque cueste creerlo, existe una extraña condición que transforma a los insectos en algo muy parecido a zombi gracias al mecanismo de increíbles hongos.
García-Roa captó la foto en la jungla peruana de la provincia de Tambopata, y logró retratar en un primer plano las esporas de un organismo zombi creciendo y alimentándose desde el cuerpo de un insecto muerto.
«Las esporas del llamado hongo ‘Zombi’ infectan a los artrópodos infiltrándose en su exoesqueleto y en sus mentes. Como resultado, los huéspedes parasitados son obligados a migrar a un lugar favorable para el crecimiento del hongo», explicó Christy Anna Hipsley, miembro del Consejo Editorial.
«Aquí, esperan la muerte, momento en que el hongo se alimenta de ellos para producir cuerpos llenos de esporas que serán lanzados para infectar a más víctimas», añadió Hipsley.
Existe una variedad de especies del reino fungi que actúan como colonizadores o parásitos de los artrópodos.
Por un lado, están aquellos de la familia Ophiocordyceps unilateralis, que ha sido encontrado con frecuencia desarrollándose en la cabeza de las hormigas carpinteras tropicales, en Tailandia.
Los expertos han notado que cuando una hormiga es infectada, comienza a demostrar comportamientos erráticos en su caminata o a presentar convulsiones. El organismo colonizador, para garantizar su existencia, obliga al insecto a mantenerse en el sobre bosque.
Luego, una vez que la hormiga muere, el hongo comienza a salir por su cabeza para así infectar a otros ejemplares.
Por otro lado, el hongo Entomophthora muscae, sobrevive gracias a un proceso que, para los humanos, puede parecer macabro.
Este hongo infecta a la hembra de una especie de mosca y, así, se logra esparcir por nuevos ejemplares porque, una vez que la mosca muere, el hongo comienza a liberar una serie de sustancias, similares a las feromonas, invitando a los machos a reproducirse con el cadáver.
Esta reacción se puede mantener entre 3 a 8 horas y podría atraer al 15% de los ejemplares masculinos.
Esta forma de control del insecto, por parte de dicho hongo, es un eficiente mecanismo para infectar con sus esporas a nuevos ejemplares y así sobrevivir.
Cabe señalar que, aunque no son zombis como tal, el destino de los infectados es igual de trágico que el de los protagonistas de las películas de zombis.