En el contexto del aumento de casos de Covid-19 que ha habido las últimas semanas en el país, el Gobierno decidió que toda la RM retrocediera a Fase 3 a partir de hoy, miércoles 27 de octubre.
Si bien distintos expertos han hecho referencia a una nueva ola de contagios, que vendría siendo la tercera, las autoridades aún no han aceptado ese escenario como tal, y en ese contexto, La Voz de Maipú conversó con el infectólogo Ignacio Silva, de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Santiago de Chile, quien reflexionó y dio su percepción sobre el complejo escenario que hoy atravesamos por la pandemia en Chile.
¿Por qué cree que ha habido un aumento de casos considerando que, según el Minsal un 90,45% de la población objetivo se ha vacunado con única y primera dosis y un 86,47% de esta población se ha vacunado con dosis única y segunda dosis?
El aumento de casos no tiene una única explicación en sí, son distintos factores. Para empezar, las vacunas no están diseñadas para prevenir el contagio, si bien tienen una efectividad significativa para esto, su principal objetivo es disminuir los cuadros graves asociados al Covid-19: la hospitalización, el ingreso a UCI y por supuesto, llegar a fallecer por la enfermedad.
Por lo tanto, hay un porcentaje de personas vacunadas con esquema completo o incluso con dosis de refuerzo, que pueden infectarse igual. Lo más probable es que hagan un cuadro leve, pero pueden tener síntomas igual y pueden contagiar a otros. O pueden tener covid asintomático, pero tener un examen positivo y estas personas pueden contagiar a otros que no están vacunados y esos sí van a generar un problema. O también el caso de personas vacunadas y que no han respondido bien a las vacunas, entonces es importante tener claro que las vacunas disminuyen el riesgo de contagio de enfermedad grave pero ninguna vacuna para ninguna enfermedad es 100% efectiva.
Lo otro es que, en la medida que fueron bajando los casos, fuimos liberando restricciones, que era esperable y era necesario también. En la medida que se liberan restricciones, y que por un lado existen personas no vacunadas y por otro un porcentaje de personas vacunadas que sí se pueden contagiar, hay mayor probabilidad que se generen contagios. Cada vez se realizan actividades con mayor riesgo, como reuniones sociales masivas, eventos, etcétera. Eso explica en parte el aumento de contagio.
Algunos expertos han puesto sobre la mesa el hecho de que estamos atravesando una tercera ola de contagios, ¿está de acuerdo con eso? ¿estaba dentro de las predicciones? Porque el gobierno hasta ahora lo ha negado…
No tiene mucha importancia el término, puede ser dos, tres, cuatro… Lo que importa más que si estamos o no ante una ola de contagios, es reconocer que los casos están aumentando y que han aumentado de manera significativa, y ver cuál va a ser la magnitud de este aumento de contagio, porque de nosotros depende que la magnitud no cause un impacto en el sistema asistencial, es decir, en la ocupación de camas, en la hospitalización, en los fallecimientos.
Mientras más grande sea la ola, mayor probabilidad vamos a tener de que algunos de estos casos sean graves, incluso en personas vacunas, y que haya más hospitalización, más requerimiento de UCI y más fallecimiento.
Entonces yo creo que la discusión tiene que enfocarse en que no nos pille la ola de contagios cuando esté reventando, en prevenir antes de que esta situación se nos escape más de la mano.
Eso se logra con distintas medidas que han sido ya más que probadas: Aumentando la cobertura de la vacunación; aumentando la velocidad de la vacunación en niños, niñas y adolescentes; tratando de llegar a los rezagados tanto de de dosis de refuerzo como de los que no se han vacunado; fortaleciendo la estrategia de trazabilidad, testeo y aislamiento y comunicando de manera efectiva que la pandemia no se ha acabado, que tenemos que mantener la percepción de riesgo y las medidas de autocuidado, el uso de mascarillas, distanciamiento físico lavado de manos, etcétera.
¿Cómo evalúa las medidas que ha tomado la autoridad sanitaria hasta ahora? En parte de la ciudadanía se percibe que no han servido de mucho, sobre todo con este aumento de contagios.
Creo que que la autoridad tiene que ser más rápida en reaccionar y generar indicadores epidemiológicos claros transparentes que nos ayuden a transitar desde mayores restricciones a menores de restricciones y viceversa.
Para eso los indicadores tienen que estar muy claros y tienen que ser asesorados por expertos, para eso hay un consejo.
Es importante que las decisiones se tomen a tiempo y reaccionar de manera preventiva y no reactiva.
¿Cree que las restricciones de la Fase 3 o Preparación serán eficientes en el contexto en el que estamos?
Creo que la restricciones de la Fase 3 no necesariamente van a tener un gran impacto por sí mismas, tal vez lo que sí puede servir es el hecho de retroceder de fase después de haber estado un buen tiempo en Fase 4 o en fases más avanzadas.
El hecho de retroceder puede servir como remezón para darse cuenta de que estamos empeorando y que podemos seguir retrocediendo. Pero no tengo certeza de que las restricciones de la Fsae 3 sean muy significativas.
¿Cómo ve el escenario de aquí en adelante en cuanto a la pandemia en nuestro país?
Es muy difícil predecir el escenario en adelante porque todo va a depender de si es que las autoridades asumen de manera responsable este este nuevo desafío para que se tomen las medidas preventivas a tiempo y de manera eficaz.
Si no se logra cumplir con estos elementos de vacunación, TTA (testeo, trazabilidad y aislamiento) y medidas de autocuidado es muy probable que, como pasó en otros países, tengamos una gran ola de contagio con una ocupación de camas críticas significativas.
Tal vez no tanto como en las olas anteriores pero sin duda que va a estresar el sistema asistencial y vamos a lamentar nuevamente fallecidos que podrían ser de prevenibles.
Cada ola de contagio que viene debería acompañarse de un aprendizaje y eso lo tendríamos que demostrar.