Caléndula es una flor silvestre, es simple, es una que todos hemos visto al pasar. Tiene muchas propiedades femeninas y como toda mujer es una protectora.
Kaléndula, no es tan diferente a las flores, es una tienda vegana ubicada en la comuna de Maipú, que al igual que la flor es delicada, pero a su vez defensora y por sobre todo acogedora. «Un lugar donde te puedas sentir cómodo y que está en todas partes», nos comenta Karina Jara, el por qué el nombre de su tienda.
Hace solo tres semanas que esta tienda vegana está ubicada, en Avenida Central 320, muy cerca del Metro Santiago Bueras. A pesar de llevar poco tiempo en este lugar, es desde hace ya un año que Karina Jara y Abraham Quiroga comenzaron a trabajar concretamente en su sueño.
«Nosotros somos vegetarianos hace 8 años y siempre nos dimos cuenta que aquí en Maipú no había nada como para abastecernos y surgió como un sueño que tuviéramos una tienda, eso hace como 3 años. Porque teníamos que ir a Santiago Centro o Avenida Providencia. Era un sueño, porque ambos teníamos trabajos distintos. El año pasado ya dejamos los trabajos y nos pusimos con el negocio«, comenta a La Voz de Maipú Abraham.
Con el financiamiento de un familiar, su «hada madrina», es que comenzaron a buscar arriendos por Maipú, pero, como afirma Karina «es realmente caro», además, de muchos requisitos que ninguno cumplía. Es por ello que Kaléndula comienza en el Barrio Las Rosas, en la casa de la mamá de Abraham, quien empezó a ser parte del equipo productivo.
«Ahí dijimos partamos acá, nos hacemos conocidos, hacemos repartos, cómo sea, pero lo hacemos. Así que partimos allá hace exactamente un año, el 27 de marzo de 2015 abrimos», comenta orgullosa Karina.
El flujo de clientes en la antigua casa del Barrio Las Rosas, era poca, pero igual llegaba. «El cambio ha sido de la tierra al cielo. Mucha gente viene, entre 200 o 300 veces más de lo que teníamos antes. O sea, los clientes de allá vienen para acá. La gente que siempre quiso ir allá, pero le quedaba súper lejos, ahora llega feliz. También estaban como nosotros, que son gente de Maipú, que no tiene muchas lucas y no te va a ir a comprar a Providencia cosas rica», explica Abraham.
Qué ofrece Kaléndula
Esta tienda vegana viene a cubrir una necesidad de muchos vegetarianos y veganos maipucinos, que tenían que viajar al menos una hora al centro de la capital para poder abastecerse de alimentos.
«Tenemos harinas que son necesarias para las personas que se alimenta de forma vegetariana. Harina de gluten, de garbanzos…» Tienen a disponibilidad frutos secos y deshidratados, quesos vegetales, mayonesas, aceites, tofu. Como también congelados: patés, hamburguesas, vienesas, bistec, nugget, entre otros.
Además, para comer en el momento ofrecen pasteles, panes integrales y diferentes tipos de empanadas. Recordar que todo lo que hay en la tienda, desde su mampara de vidrio hacia dentro es vegano, «sin sufrimiento animal», dice Abraham.
Rol social de Kaléndula
Cuando Karina, Abraham, su pequeño hijo de 9 años y el que viene en camino, se propusieron crear Kaléndula, tenían claro que no iba ser solo un intercambio de productos por dinero, sino que un espacio de enseñanza sobre la buena alimentación, un lugar de encuentro y de orientación.
«Queremos que sea un espacio donde se pueda tener información, tenemos folletos de Animal Libre, por ejemplo. Llega en realidad harto niño más chico, como adolescentes que están en la búsqueda, que igual queremos ofrecerle ese espacio, de ayudarlos un poco«, comenta Karina.
A lo que Abraham agrega que «hay mucho vegano y vegetariano que deja de consumir productos de origen animal, pero que lleva una mala alimentación. Se alimenta de muchos carbohidratos, papas fritas. Y la idea es respetar a todos, entonces, respetemos nuestro cuerpo y aprendamos a alimentarnos».
El objetivo de Karina y Abraham es entregar un espacio agradable, donde se pueda conseguir información y ayuda respecto a estos temas, no que sea una tienda más.
Fotos: Marlene Valladares.