En una decisión que marca un hito en la regulación de las empresas de aplicaciones de transporte en Chile, este viernes el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) presentó a la Contraloría General de la República (CGR) el reglamento oficial de la Ley N°21.553, más conocida como la Ley Uber. La medida busca establecer requisitos específicos, como la licencia de conducir, la antigüedad del vehículo y la cilindrada máxima, con el objetivo de garantizar la seguridad de usuarios y conductores.
El proceso de elaboración del reglamento, que abarcó nueve meses, no estuvo exento de tensiones. Las aplicaciones de transporte (EAT) expresaron preocupación desde el principio, argumentando que las medidas propuestas podrían reducir significativamente la disponibilidad de viajes, aumentar los costos del sistema y contribuir al desempleo en un 0,5%. Además, Uber lanzó una campaña denominada «Deja Moverme» para persuadir a los usuarios a rechazar el reglamento, alegando que afectaría negativamente la experiencia de los usuarios y de aquellos que encuentran empleo a través de las aplicaciones.
En respuesta a las críticas y presiones, el gobierno admitió la posibilidad de ajustar el reglamento antes de su aprobación final. El documento presentado a Contraloría revela dos cambios significativos: la cilindrada de los vehículos de las empresas de aplicaciones de transporte debe ser igual o «equivalente» a 1.4 litros, en lugar de ser simplemente el máximo permitido, y se amplía de siete a diez años la antigüedad máxima de los vehículos para su inscripción y traslado de pasajeros.
El gobierno destacó que el reglamento tiene como enfoque principal la seguridad. El ministro Muñoz afirmó: «Este es un reglamento que se ciñe explícitamente a la seguridad. Ese es su principal foco».
La presentación inesperada del reglamento, antes de la fecha límite del 19 de enero, tomó a muchos por sorpresa. Desde Alianza IN, la agrupación de empresas de transporte, expresaron su preocupación por los posibles impactos negativos de las modificaciones al borrador original y están evaluando detalladamente el contenido del reglamento.
Con la presentación del reglamento a Contraloría, se inicia un período en el cual se analizará y, eventualmente, se aprobará. Una vez aprobado, los conductores de aplicaciones tendrán un mes para adaptarse antes de que las nuevas exigencias entren en vigencia. Además de los ajustes mencionados, el reglamento también establece la creación de un registro electrónico de conductores, obligatorio para todas las Empresas de Aplicaciones de Transporte, conductores y vehículos, con acceso público y segmentado por regiones.