Bajo la consigna: «la música en vivo no es un delito», varios músicos se han manifestado en busca de nuevos protocolos sanitarios para permitir el regreso de los eventos masivos.
Según las últimas modificaciones en el Plan Paso a Paso, los conciertos musicales están catalogados como una actividad sin interacción entre asistentes, lo que implica, básicamente, las siguientes medidas:
- Mantener una ubicación fija durante toda la actividad.
- Mantener siempre 1 metro de distancia entre otras personas.
- Uso de mascarilla en todo momento.
- Sin consumo de alimentos.
En el caso de la Fase 3, en la que actualmente está la Región Metropolitana:
- En recintos cerrados: 100 a 500 personas TODAS con Pase de Movilidad.
- En recintos abiertos: 200 a 1.000 personas TODAS con Pase de Movilidad.
En este contexto, la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales (SCD) ha considerado que estos cambios aún no son suficientes para reactivar su actividad.
La experiencia de una artista maipucina
La artista maipucina Luna Lamilla, en relación a cómo ha llevado a cabo su trabajo con la música durante la pandemia, comenta que se ha tenido que transformar todo a la modalidad online, tanto conciertos como los talleres que imparte.
«Tuve la oportunidad de seguir con clases online en las municipalidades en las que trabajaba ya», comentó, agregando que la Municipalidad de Pudahuel fue pionera en cuanto a transformar los programas culturales.
Esto último, a diferencia de la situación con la Escuela Superior de las Artes de Maipú (ESAM), donde indica que «hubo ramos que no se transformaron para que pudiera ser online».
Asimismo, destaca su participación en el festival Ruidosa, en modalidad online, que es una de las formas que hallaron los artistas musicales para continuar con sus trabajos.
Por último, comenta su buen pasar por Escuelas de Rock, donde quedó seleccionada para participar en la siguiente edición del Rockódromo, donde el pasado 2020 el también maipucino Camilo Antileo tuvo la oportunidad de participar.