Lo hemos dicho en otras ocasiones. Cada vez que en Maipú se ve el negocio de la basura, ya sea en la recolección, o su deposición cosas raras comienzan a suceder. Si hace un par de meses quedó la grande al dividir la comuna en dos, con el fin de que igual número de empresas recolectaran los residuos domiciliarios, hoy el tema pasa por el lugar que se escogerá para botar las 18.000 toneladas mensuales de basura que producimos los maipucinos.
El tema no es menor, pues el negocio mueve millones de dólares al año y, Maipú es la comuna que más desechos por habitantes produce en todo el país.
¿QUÉ PASÓ AHORA?
El día 22 de marzo la Municipalidad de Maipú publicó una licitación para definir a la empresa que recibirá la basura que genera nuestra comuna. El Municipio pidió que se le hagan llegar dos propuestas económicas: una con los valores considerando hasta diciembre de 2012 y otra a 60 meses, es decir 5 años. De esta manera el Concejo Municipal podrá definir la mejor opción para la comuna.
Sin embargo el 1 de abril, la empresa Proactiva Servicios Urbanos S.A, la cual opera el Relleno Sanitario Santiago Poniente (RSSP), ingresó una demanda al Tribunal de Contratación Pública, con el fin de paralizar la licitación pues, en opinión de la empresa, “la Municipalidad de Maipú ha elaborado unas bases de licitación, y obtenido la aprobación de la Fiscalía Nacional Económica (…) en forma tal que impiden la libre concurrencia de los oferentes y su participación en igualdad de condiciones”. En términos simples, Proactiva piensa que la licitación se armó de manera tal, que se le hizo un traje a la medida a sus competidores, con el fin de perjudicar la participación de la empresa.
¿BASES A LA MEDIDA O EXCESO DE ATRIBUCIONES?
La polémica pasa pues la Municipalidad exige que las empresas participantes cumplan con la Calificación Ambiental (RCA) respecto a las vías de acceso, planta de tratamiento de lixiviados (líquido que produce la basura) y planta de quema de biogás. Al respecto Proactiva se defiende pues acusa que “las bases introducen temas que afectan directamente a algunos oferentes y a otros no, y además se extralimita en sus atribuciones pues invade el campo de acción de otros entes del estado, como lo son aquellos con competencia ambiental y sanitaria”
En el documento de 33 páginas (disponible aquí) la empresa cuenta la historia que ha debido enfrentar, con un ex alcalde preso por desacato, problemas para obtener su patente, y el incumplimiento de algunos municipios (Maipú incluido), pues no botaron sus desechos ahí, aún cuando habían acuerdos a través de Emeres.
Pero va más allá. También se menciona que el tema de la construcción del camino, que permitía a los camiones llegar al relleno, fracasó pues se necesitaba obtener servidumbre de propietarios de predios aledaños. En el curso del proceso, uno se declaró en quiebra, con otro se llegó a acuerdo y tres se opusieron a la servidumbre solicitada. Uno de los que se negaron, fue la Municipalidad de Maipú, misma que hoy exige el camino en sus bases.
Otro tema, es que la basura que se botaría desde Maipú, no usaría ese camino, sino que el de Rinconada. Además, dice Proactiva, un nuevo camino no se condice con el volumen de desechos que recibe Santiago Poniente, en tanto se proyectó para mucho más, pero al no cumplir el compromiso de llevar ahí su basura por parte de varios municipios, no existe la necesidad de tener un camino. No obstante la empresa quiso cumplir.
¿QUÉ DIJO EL TRIBUNAL?
El tribunal acogió la petición de Proactiva y se está estudiando dejar sin efecto la licitación. Al parecer, en una primera instancia, los argumentos esgrimidos por la empresa, hacen presumir que la licitación de Maipú se habría hecho con la intención de dejarlos fuera. Una rara situación, si se considera que, al encontrarse el RSSP en Maipú, sus precios deberían ser mucho más económicos que los de su competencia. En el documento, Proactiva estima en 700 millones el ahorro anual para Maipú en caso de llevar nuestra basura al RSSP. Esto en base a la licitación de Huechuraba, en la cual cada empresa mostró sus tarifas.
El tribunal pidió el día 5 de abril de 2011 un informe con antecedentes a la Municipalidad de Maipú. Para ello les dio un plazo fatal de 10 días.
Como ven, en esta pasada, de nuevo habrá polémica.