La pandemia, junto a la nueva modalidad de evaluaciones online, ha generado que las ofertas online para hacer exámenes y pruebas sean cada vez más frecuentes tanto en la educación escolar como también en distintas universidades del país.
En el mes de julio del presente año se supo de una investigación que la Universidad de Chile realizó a 61 estudiantes de Ingeniería por copia masiva mediante el uso de redes sociales. Estas plataformas han tomado un importante rol a la hora de realizar exámenes, siendo usadas para transferir respuestas, pedir ayuda y ofrecer servicios para hacer pruebas e incluso aprobar ramos.
Con el eslogan de «¿Temes no pasar el semestre?» o «¿Quieres subir tus notas?», estas redes bastante organizadas promocionan sus ofertas online a estudiantes que estén teniendo dificultades en sus asignaturas o ramos, lo cual ha dado evidentes frutos en muchos casos.
Hace unos días, un profesor universitario en contacto con el matinal Mucho Gusto, afirmó que de forma presencial el 10% de los estudiantes tenían notas sobre 5.0 en su ramo, pero con las pruebas online esta cifra aumentó al 90%.
Según constatan algunos reportajes, para ramos como Cálculo I, los precios pueden ir desde 35 a 40 mil pesos, ascendiendo a cifras sobre 80 mil pesos dependiendo de la dificultad del ramo solicitado. Para realizar las distintas evaluaciones estos “profesionales” suplantan la identidad del alumno y realizan la prueba a su nombre, no sin antes recibir un 50% del pago minutos antes de la prueba.
¿Es un acto derechamente ilegal?
Lo más reciente ha sido lo informado este jueves por BioBioChile, donde un estudiante de la Universidad Andrés Bello, realizó una denuncia de forma anónima manifestando su enojo debido a que compañeros han hecho uso de estas “ofertas online”, lo cual pone injustamente en una posición de ventaja a los alumnos con medios económicos para costear este “servicio”.
Desde la entidad de educación superior han ingresado una querella criminal ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, por el delito de usurpación de nombre, en grado de tentativa.
Al respecto Juan Eduardo Vargas, subsecretario de Educación Superior, en conversación con el matinal Mucho Gusto, se refirió a estas ofertas que son cada vez más habituales en pandemia diciendo que: “Es un tema delicado y que requiere una atención urgente. Tengo la sospecha de que eso podría constituir un delito de asociación ilícita”, además agrega: “Lo preocupante es que estén pasando estudiantes que no saben realmente lo que se les está enseñando”.
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