Ya llevamos un poco más de un año conviviendo con este tan mortal virus, donde hemos aprendido a convivir de distinta forma a como estábamos acostumbrados con el frecuente lavado de manos, el distanciamiento social y el uso de mascarillas es algo cotidiano.
Por una parte, con estas medidas se trata de disminuir el contagio del COVID y de paso bajaron de forma considerable otras enfermedades respiratorias graves, como el virus sincicial y la influenza. Asimismo, otra de las medidas que se han adoptado a nivel mundial para controlar la enfermedad es la inoculación por medio de vacunas.
Una vacuna es una preparación que genera inmunidad en las personas ante una enfermedad, produciendo anticuerpos también conocidos como inmunoglobulinas, identifican y neutralizan elementos extraños tales como bacterias y virus.
Se pueden generar anticuerpos contagiándose con la enfermedad o por medio de vacunas, el sistema inmunológico de nuestro cuerpo, reconoce al agente como una amenaza, la destruye y la guarda como registro de este, de modo que el sistema inmune puede reconocer y destruir más fácilmente cualquier microorganismo que encuentre.
Las vacunas se usan con carácter profilácticos, es decir, para prevenir o aminorar los efectos de una futura infección producida por un patógeno, pueden estar compuestas de bacterias o de virus atenuados o inactivados y han estado presente durante toda nuestra existencia contra la gripe, VPH, varicela, poliomielitis, sarampión, tétano, viruela, etc.
En el caso de las vacunas de virus vivos atenuados, se cultivan bajo condiciones en las cuales pierden o atenúan sus propiedades patógenas. Suelen provocar una respuesta inmunológica mas duradera y son las más usuales en los adultos, el microorganismo aunque está debilitado, se encuentra activo y se crea una ligera infección que es combatir de forma natural por el sistema inmune, y provoca en algunos casos síntomas del patógeno de forma leve.
En cambio, las vacunas con agente inactivados, son tratados con productos químicos o calor, causando la muerte del patógeno, pero manteniendo su estructura. Este tipo de vacunas activa el sistema inmune, pero el agente dañino no ataca al huésped y es incapaz de reproducirse, ya que se encuentra inactivo y genera menos efectos secundarios y a su vez la intensidad inmunológica es menor y puede durar menos tiempo.
Chile cuenta con tres vacunas contra el Covid-19, autorizadas por el Instituto de Salud Publica (ISP), fabricadas por los laboratorios Pfizer-BioNTech, Sinovac, y recientemente se sumó la autorización de la vacuna de origen Britanica, Life Sciences.
La vacuna Pfizer-BioNtech, con una efectividad del 95% según estudios realizados en personas de distintas razas, edades y enfermedades crónicas. Esta vacuna se transporta y almacena en cadena de frío, entre 60 y 80 grados bajo cero, se descongela a temperatura ambiente antes de administrar y puede durar así hasta 2 horas, lo que dificulta su mantención ya que necesita ultra congeladores.
La vacuna Sinovac o Coronavac, de origen chino, con una efectividad del 91%, según estudios para evitar casos graves que necesita hospitalización, vacuna de virus inactivado, se almacena a temperatura estándar entre 2 y 8 grados bajo cero. Es la más utilizada en Chile y puede producir enrojecimiento en la zona de la punción, puede presentar fiebre, malestar general y/o alergias causado por algún componente de la vacuna. Ambas vacunas necesitan dos dosis para lograr el máximo de inoculación.
Estas vacunas están indicadas a personas mayores de 18 años y no deben vacunarse aquellas que presente fiebre de al menos 38°C. Además, las personas que tienen una enfermedad crónica no deben de dejar de tomar sus medicamentos.
Debe quedar claro que esta medida no nos libra de contraer la enfermedad, nos podemos contagiar de igual manera y contagiar a otras personas, incluso contando con las dos dosis. La vacuna permite que si nos enfermamos sea leve y no lleguemos a una UCI, pero puedo contagiar a una persona que sí puede fallecer. Lamentablemente se crea una falsa seguridad, las personas se relajan y no se cuidan, pero debemos seguir protegiéndonos usando mascarilla y distancia social.
La vacuna nos hace crear anticuerpos y nuestro organismo reacciona contra el agente patógeno, hacemos una enfermedad más atenuada que puede o no presentar síntomas parecido a una gripe, y significa que tu cuerpo está generando inmunidad. Se recomienda tomar mucho liquido, paracetamol en caso de fiebre y paños tibios en la zona de aplicación en caso de dolor, hinchazón, o irritación, además de dolor de cabeza o muscular, escalofríos y cansancio.
Es importante vacunarse y seguir cuidándonos, para poder controlar esta pandemia. Informémonos sobre el calendario de vacunación y los lugares de atención en nuestra comuna.