Durante el fin de semana se viralizó una publicación en Redes Sociales hecha por una maipucina. A través de su Instagram, la joven subió videos y fotografías que daban cuenta de una preocupante situación que le tocó vivir a su familia el pasado viernes: un sujeto intentó entrar a su hogar a la fuerza y apuntó con un arma a su abuela, a su tía y a su prima pequeña de nueve años.
«Favor su ayuda para difundir lo que pasó anoche en mi casa, ubicada en Maipú, a las 22:30 horas. Mi tía iba saliendo de su domicilio a dejar a mi abuela, cuando viene un sujeto (nacionalidad venezolana y sin documentación) corriendo exigiéndole que lo deje entrar al domicilio, empezaron a forcejar hasta que sacó un arma apuntando a mi tía, abuela y mi prima de 9 años.
Por suerte mi tío lo pudo reducir y con ayuda de los vecinos retenerlo hasta la llegada Carabineros. Nunca pensamos que la delincuencia podría llegar de esta manera, y sentirnos tan vulnerable e inseguro en nuestro propio hogar», se lee en la publicación.
La historia en primera persona
El equipo de La Voz de Maipú se contactó con los tíos de la usuaria, Jorge y Daniela, quienes enfrentaron directamente al sujeto de nacionalidad venezolana. Ellos viven hace cuatro años en una villa cerca del Estadio Santiago Bueras, donde residen mayoritariamente adultos mayores y lo describen como un lugar tranquilo.
«El viernes en la noche yo me quedé solo en la casa con mi bebé de ocho meses, y mi esposa con mi hija (de nueve años) salieron caminando para ir a dejar a mi suegra a su casa que queda a tres cuadras de acá«, detalla Jorge.
Daniela, que se vio enfrentada directamente con el violento sujeto, cuenta que «no alcanzamos a dar tres pasos fuera de la casa y vimos que un tipo venía corriendo por el pasaje, gritando que lo veían siguiendo y lo querían matar«. La maipucina no alcanzó a reaccionar bien cuando ya se encontraba forcejeando la reja de su casa con el hombre «alto y delgado» que intentaba entrar a su domicilio con un arma en la mano.
«Mi mamá quedó adelante recibiendo los golpes, mientras mi hija gritaba y tocaba la puerta de la casa para que el papá le abriera», recuerda Daniela, quien puntualiza que su madre, de 63 años, tiene artrosis y es anticoagulada, es decir, «si recibe golpes en el cuerpo le quedan hematomas muy grandes».
En ese intertanto de gritos, golpes y forcejeo, Jorge se alertó de la situación y rápidamente fue a abrir la puerta. «Cuando abrí, entró mi hija llorando, después entraron mi señora y mi suegra y de repente veo que este tipo se me viene encima«, cuenta Jorge.
El padre de familia se puso a pelear en su comedor con el extraño que, con una actitud violenta, había irrumpido en su hogar. Jorge logró reducirlo, y con todo el escándalo, los vecinos se alertaron de la situación y entraron a la casa para brindar ayuda hasta la llegada de Carabineros.
Distintos vecinos de la villa donde viven Jorge y Daniela cuentan con cámaras de seguridad. Gracias a eso, posteriormente se dieron cuenta de que el sujeto había intentado entrar antes a otra casa, pero que los perros del jardín terminaron espantándolo. «Nunca nadie lo siguió«, aclara Daniela, añadiendo que «el gallo cambiaba la historia a cada rato, hablaba unas incoherencias horribles».
Carabineros en Maipú justifican la demora por disminución de personal policial
Carabineros tardó, según recuerda la pareja, al menos una hora y media en llegar al lugar y detener al sujeto. Con ellos pudieron corroborar que se trataba de una persona sin documentos y que estaba ilegalmente en Chile.
«Cuando él se dio cuenta de que estábamos llamando a Carabineros quiso volver a escapar, pero menos mal con la ayuda de los vecinos pudimos retenerlo ahí en el patio», añade la mujer, que hoy reconoce tener miedo, rabia y frustración al no saber sobre el paradero de este sujeto.
La institución uniformada le explicó a la pareja que la demora se debía a que la patrulla que corresponde a ese sector estaba en otro procedimiento policial. Además, añadieron que les habían dado mal la dirección y eso atrasó aún más el proceso.
Daniela se comunicó con la 25° Comisaría de Maipú para exponerle las nulas rondas de seguridad en su Villa que permitían este y otro tipo de delitos. «La respuesta que me dieron es que, lamentablemente, hay muy poca dotación de Carabineros porque, o se han retirado o ya nadie quiere ser Carabinero«.
Lo que Daniela y Jorge más lamentan es la poca tranquilidad que tienen ahora como familia. «Es complicado, tú estás haciendo tu vida normal y de la nada te llega una sacudida que te cambia el chip, tu perspectiva de vida, invade tu tranquilidad… Todo», comenta Daniela, quien asegura que sin duda quien más afectada está es su hija de nueve años.
«Ella es muy introvertida y me parte el corazón saber que se está guardando todo esto. Tiene miedo, no quiere quedarse sola en la casa ni dormir sola en su pieza», detalla la madre.
El sujeto pasó a control de detención el sábado, pero al ser fin de semana, Carabineros le dijo a la pareja que su trabajo llegaba hasta ese día y que el resto quedaba en manos de Fiscalía.
Desde el Ministerio Público aún no les informan a la familia sobre la decisión que se tomó respecto al ciudadano venezolano. «Nos dijeron que el sistema se demora 48 horas en actualizarse y que recién el miércoles podríamos saber», explica Daniela con justificada frustración.
