Cuando observamos los 135 kilómetros cuadrados que cubre la superficie de Maipú, vemos una comuna donde el sector urbano se impone a lo rural, pero no siempre fue así.
Esta imagen contemporánea, en gran medida, se debe al Plan Regulador Intercomunal impulsado por la administración de Eduardo Frei Montalva, que después su sucesor Salvador Allende continuó y que finalizó como periodo en 1976, siendo bautizado como “Ciclo Desarrollista” por el historiador maipucino Óscar Riquelme en el capítulo tres de su tesis doctoral “Inversión pública y contratos de construcción de viviendas en una periferia urbana de América Latina. El caso de la planificación urbana de Maipú durante el ciclo desarrollista, 1965-1976”.
Dicho plan, hizo explotar el crecimiento demográfico en la comuna, la que se vio favorecida por los proyectos habitacionales estatales Corporación de la Vivienda (CORVI) y la Corporación de Mejoramiento Urbano (CORMU) con un amplio apoyo del sector privado.