Desde hace ya dos semanas que el Sindicato de Trabajadores Empresa Terraustral Oeste se encuentra negociando con la directiva del establecimiento para buscar soluciones a sus demandas. Sin embargo, no han existido avances en las mesas de trabajo. Es por ello, que el sindicato dio comienzo hoy a su primer día de huelga legal.
Son tres las requerimientos principales: asignación por movilización y colación, incentivo por antigüedad y la reducción de las horas lectivas.
Adolfo Ramos, presidente del sindicato, aclara la importancia de estas demandas diciendo que «el tema de la movilización y la colación es una deuda pendiente desde que partió el colegio, nunca hemos tenido este tipo de asignaciones. El incentivo a la antigüedad, que es aumentar los bonos de los profesores que llevan más años: beneficia la continuidad de los docentes en el establecimiento, lo que significa que tendrán más experiencia y podrán construir identidad. La reducción de las horas lectivas es primordial, ya que tenemos profesores que están prácticamente todo el día en clases, por lo que no tienen tiempo para planificar, ni para revisar sus pruebas y esto incide directamente en la calidad de educación que entrega el colegio».
Adolfo Ramos, quien también es profesor de música del lugar, explica que hay una serie de otras peticiones, como es el pago de los días de licencia, también que en el casino que existe en el colegio se vendan almuerzos, lo cual ha sido una lucha permanente del Centro de Padres. Otra petición es la reposición de elementos básicos para el funcionamiento del establecimeinto, como el papel higiénico y jabón.
«Imagínate en un colegio con 3.200 alumnos y 239 trabajadores ponen «Confort» una vez a la semana, los baños son escasos, no hay papel para secarse las manos y no hay jabón. Cosas que en definitiva son de humanidad, ni siquiera es un tema de la negociación. En el fondo nosotros no estamos negociando para que nos pongan «Confort», eso es parte del sentido humano de un establecimiento como este», dice a La Voz de Maipú Adolfo Ramos.
Pero aclara que «el colegio sistemáticamente ha intentado ahorrarse un montón de plata. El objetivo del establecimiento, que es un negocio, es optimizar las ganancias. Durante toda la negociación se nos ha recalcado que los dueños del colegio quieren ganar plata. Se ha hablado principalmente de números y no de calidad humana, no de calidad de educación, no de buen trato a los profesores, sino que principalmente de aspecto económicos, de cuánta plata salen las demandas».
El presidente del sindicato, que representa a más de 100 trabajadores del colegio, de un universo de 239, los cuales son principalmente profesores, explica que la directiva ha ofrecido 28 millones en prestaciones, las cuales son 4, «pero nosotros tenemos el balance donde ellos anualmente ganan cerca de 500 millones de pesos, en ganancia neta. Es decir, que no nos están dando ni el 5% de las ganancias netas. Eso habla de un lucro pero feroz y que nosotros obviamente no vamos a seguir beneficiando», agrega Adolfo Ramos.
Esta huelga legal tiene el apoyo del Centro Padres y del Centro de Alumnos, quienes en el primer día de manifestación los acompañaron durante una marcha por el Barrio El Abrazo y durante toda la jornada posterior. Saben que los requerimientos son en beneficio para toda la comunidad escolar.