Un acierto se anotó la periodista Natalia Figueroa tras contactar a distintos funcionarios de la Municipalidad de Maipú y darles el espacio para hablar sobre los famosos bailes en la red social TikTok.
Esto a partir de los distintos videos que la alcaldesa Cathy Barriga ha compartido en su cuenta personal/institucional, donde aparece bailando junto a funcionarios en distintos lugares, incluyendo la Cuenta Pública 2020.
Los funcionarios, quienes hablaron con El Desconcierto a condición de resguardar su identidad, cuentan sus impresiones sobre la última moda en alcaldía de grabar videos musicales.
Uno de los entrevistados, identificado como Luis, resume la sensación de parte de los funcionarios: «el que no baila o no se saca una selfie, no sigue».
Por su parte, Constanza ex funcionaria de alcaldía asegura que han habido castigos por no aceptar ser parte de la rutina de selfies y bailes:
“Si tú no bailas con ella, se lo toma como una afrenta personal. Lo mismo pasa para los eventos, a mí me daba una vergüenza gigante, pero tenías que bailar o te costaba la pega. O es hacer el ridículo junto a ella o no te queda de otra”, agregó para el diario del Matinal de los que sobran.
El grupo de choque
En la nota, Figueroa hace mención al «grupo de choque» que se formó al alero del ex asesor Luis Japaz, quien finalmente fue desvinculado por su cercanía con el ex Secretario General de la CODEDUC, Sergio Barrera, involucrado en el caso Audios de la Codeduc y dado a conocer por La Voz en su momento.
La periodista además entrega datos poco conocidos hasta ahora, como el sueldo de $500.000 por disfrazarse de Smapina, el conocido corpóreo institucional de Smapa.
Como era de esperar, Karen Garrido (ex Renovación Nacional), señaló que «si eso no perjudica a nadie, todo lo contrario, ella puede seguir haciendo un maravilloso trabajo por la comuna”.
En la misma línea, el concejal Alejandro Almendares (Renovación Nacional), primera mayoría comunal, evitó la polémica declinando hacer comentarios.
Quien sí habló fue el concejal comunista, Ariel Ramos, quien declaró que le «ha tocado escuchar relatos de trabajadoras que las acusan de ser cercanos a mí y que les han dicho que si no cortan su relación de cercanía van a perder su fuente laboral, por ejemplo, si siguen comentando a través de las redes sociales«.
La Voz ha denunciado previamente esta práctica de bailes, donde incluso hemos visto al jefe de seguridad, Gonzalo Huenumil, siendo parte de estas performances, función mediática que luego ha traído dificultades en su entendimiento con la comunidad.