Alberto Undurraga (DC), ex alcalde de Maipú y recientemente inscrito como candidato presidencial, pasó por nuestra comuna en dos períodos edilicios entre el año 2004 y 2012, justo antes del arribo de Vittori.
A su currículum se suma el rol que jugó como ministro de Obras Públicas durante segundo gobierno de la Presidenta Bachelet, el cual sobrevivió a múltiples cambios de gabinete.
Hoy, Undurraga se encuentra en plena carrera para ser Presidente de Chile y nuevamente accedió a dar una entrevista a La Voz de Maipú.
Alberto, sabemos que el día 23 de diciembre realizó su preinscripción como candidato presidencial, ¿Cuáles son los temas sobre los que hará énfasis y articulará su campaña?
Nuestra candidatura tiene el propósito de construir un liderazgo de mayorías, primero en la DC, después en la oposición, para luego ganar la elección presidencial y liderar las transformaciones que Chile requiere.
Las transformaciones que nosotros estamos impulsando van en la misma línea de las transformaciones que se impulsan para el cambio de Constitución y ese es nuestro énfasis. Por lo tanto, estamos hablando en un primer lugar de derechos básicos garantizados en pensiones, en salud, en seguridad, en educación, con estándares que sean definidos para hacerlos exigibles y financiables.
También hablamos de crecimiento verde, el fomento de nuevas energías y que el agua sea un bien nacional de uso público. Tercero, igualdad de trato, igualdad de trato en todos y cada uno de los espacios, paridad entre hombres y mujeres, paridad entre todos los espacios públicos e igualdad de trato entre las regiones, igualdad de trato ante la justicia e igualdad de trato en el mundo laboral.
Por último, un cuarto eje muy fundamental es recuperar el trabajo para millones de chilenos y chilenas que hoy día están sin trabajo, y eso a través de política de inversión pública y en políticas de apoyo especial a las mujeres.
Pensando en los recientes acontecimientos en nuestra comuna, de continuas balaceras nocturnas y enfrentamientos a plena luz de día en lugares públicos y familiares, que han cobrado la vida de dos personas inocentes. ¿Cuál cree que debe ser el abordaje, desde una visión Estado, del orden y la seguridad pública en situaciones como esta? ¿Cuál es el rol y misión que Carabineros de Chile debieran cumplir?
Es inaceptable todo tipo de balacera y más aún cuando los que fallecen son inocentes. Esto que sucedió en la Plaza de Maipú sucede todas las semanas en distintas villas y poblaciones de Chile. Me ha tocado estar en la población Yungay, en La Granja, y hay balaceras, y me ha tocado estar en otras villas y hay balaceras. Nos lo dicen distintas personas de distintas poblaciones de Chile, una de las prioridades es enfrentar el narcotráfico y a las bandas delictuales
Esto se enfrenta en varios niveles, se enfrenta en un nivel, por cierto, con mayores penas, pero no basta solo con eso, sino que conjunto con ello una reforma a las policías, una reforma a las policías que pueda permitir el control civil, el respeto a los Derechos Humanos y también una mayor eficacia para enfrentar el narcotráfico.
Cuando decimos en varios niveles, no es solo en los niveles operativos contra las balaceras, sino que quién los financia y quiénes son los peces gordos detrás de cada una de las operaciones, detrás de cada una de las bandas; de eso, se ha avanzado muy poco en Chile. La diferencia del número de Carabineros por habitante que hay en las distintas comunas dan cuenta de la inequidad de la ciudad, y tenemos que tender a emparejarlo, de manera de tener más policías en las calles resguardando el orden público.
Las policías no tienen solamente un rol operativo, sino que también un rol de inteligencia, de desarticular bandas, de desarticular el narcotráfico, y para ellos se requiere no sólo Carabineros sino que también la Unidad de Análisis Financiero, que esté realizando las distintas cuentas, porque hasta ahora los logros en materia de combate al narcotráfico están a nivel operativo, porque se pilla un cargamento, una casa-bodega o porque un grupo de narcotraficantes son detenidos, pero no se ha llegado a los peces gordos detrás del narcotráfico y ese es una labor de inteligencia, en la cual la policía tiene muchos pendientes.
Ahora, considerando su experiencia en el gobierno y gestión municipal, ¿Cuál es la responsabilidad que el Alcalde -o Alcaldesa- tendría en la ejecución de medidas que prevengan o intervengan directamente en el problema? ¿O es una responsabilidad y labor que sólo le compete al gobierno central y que sólo debe ser facilitada por la autoridad edilicia de turno?
La primera responsabilidad es de los delincuentes, y a ellos hay que detenerlos, hacerles juicio y condenarlos. La responsabilidad del seguimiento de los delincuentes y de la prevención policial está en el Gobierno central. Ahora bien, los gobiernos municipales tienen, no sólo la facultad, sino que tienen las capacidades de poder facilitar el trabajo de las policías, organizar a los vecinos y generar un mayor ordenamiento territorial, y esas tres son importantes para mejorar la seguridad, pero digámoslo francamente, son responsabilidades residuales respecto a lo fundamental que hace el Estado.
Por otro lado, pero en el mismo tema, ¿cree usted que el aumento explosivo del comercio ambulante y la instalación de ferias sin control municipal, puede haber repercutido en la ocurrencia de estos hechos, en cómo ocurrieron (a plena luz del día, en medio de cientos de personas aglomeradas comprando)?
El aumento explosivo de las ferias navideñas no es un fenómeno sólo de Maipú, sino que tiene que ver con la pandemia y, como muchos vecinos y vecinas en distintos lugares de Chile, se organizaron para poder tener un sustento dado la crisis económica actual. Lo que uno espera de un municipio es que cuando esto sucede tenga los mínimos resguardos, si no se tuvieron los mínimos resguardos por supuesto que habría -en eso específico- responsabilidad del municipio.
Por último, se entiende que como autoridad debe ser difícil convivir con las críticas constantes, no obstante el rol de la prensa es el de fiscalizar permanentemente la labor pública ante los ojos de la ciudadanía. En ese sentido, ¿Cómo recuerda su vínculo con LVDM durante su gestión edilicia?
Una de mis primeras entrevistas en Maipú fue de Nicolás Aravena, cuando en ese tiempo no sé si existía La Voz de Maipú o estaba en sus inicios. Fue una de mis primeras entrevistas, yo tuve en LVDM por un lado la posibilidad de informar de lo que estábamos haciendo y por qué lo hacíamos, como también recibíamos críticas y sugerencias, las que contestamos como correspondía, por eso en democracia es esencial que la prensa juegue un rol crítico, y molestarse por eso me parece que no es una actitud muy madura desde la mirada de la democracia.
Toda la prensa, tanto la prensa nacional como la prensa regional o la prensa comunal, merecen el máximo respeto en el rol que cumplen informando y también investigando o preguntando. Y finalmente, si la prensa no hace preguntas incómodas, no está haciendo su trabajo, y yo creo que a las preguntas incómodas hay que saber contestarlas y en ningún caso ningunearlas.